El cáncer “es la segunda causa de muerte a escala mundial, y de acuerdo con la agencia internacional de investigación sobre el cáncer de la Organización Mundial de la Salud, en 2020 más de 19 millones de personas fueron diagnosticadas con esta enfermedad, que causó nueve millones de fallecimientos”.
En el caso de México, el año pasado “se registraron poco más de 90 mil muertes”; el padecimiento “está sólo por debajo de enfermedades cardiovasculares, y un escalón arriba de las muertes por diabetes mellitus”, precisó la oncóloga médica Nora Sobrevilla Moreno.
En conferencia de prensa virtual, la experta formada en el Centro Médico Nacional 20 de Noviembre del Issste, añadió que alrededor de “la mitad de los pacientes van a morir, y lo más grave es que de 30 a 60 por ciento van a ser diagnosticados en etapas avanzadas”, lo que aumenta las posibilidades de fallecer.
Ante ello, se han desarrollado “nuevas terapias para que puedan sobrevivir más tiempo y con mejor calidad de vida”, y destacó la inmunoterapia, que se introdujo en México hace una década.
Esta terapia no sólo se utiliza para tratar el melanoma, sino también tumores de cabeza y cuello, pulmón, riñón, vejiga, estómago, hígado, cuello uterino, colorrectal y linfoma de Hodgkin en diversos estadios o etapas de la enfermedad. Además continúan ensayos clínicos en otros tipos de cáncer y la intención es que estén disponibles en el sector privado y en el sistema de salud público.
La especialista explicó que las células tumorales emiten sustancias que inhiben la respuesta inmune del cuerpo para combatir el padecimiento, y así progresa y se extiende. Los fármacos basados en la inmunoterapia combaten esa capacidad, y activan las defensas del paciente para atacar directamente las células cancerígenas.
“La idea crucial de la inmunoterapia consiste en bloquear una proteína que actúa como un freno en la activación de las células T, las cuales son una especie de células inmunes cuyo principal propósito es identificar y matar patógenos invasores o células infectadas, logrando así que éstas combatan el cáncer. Este avance condujo al desarrollo del primer fármaco que permite extender la supervivencia de pacientes con melanoma en etapa tardía a tres años, e incluso muchos viven 10 años o más”.
La inmunoterapia es el resultado de la investigación de Bristol Myers Squibb, en alianza con James Allison, director del Anderson Cancer Center de la Universidad de Texas.