Brasilia. El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, declaró ayer que quiere privatizar la estatal Petrobras, mientras, por otro lado, autorizó el ingreso de fuerzas militares de Estados Unidos al país para realizar ejercicios militares el próximo mes.
Paulo Guedes, ministro de Economía, sugirió antier que el gobierno podría vender parte de su participación de control en la empresa estatal petrolera para financiar programas de bienestar.
Las acciones preferentes de Petrobras subieron 2 por ciento tras los comentarios del mandatario, antes de reducir el avance a 1 por ciento.
“Quiero privatizar Petrobras. Revisaré con el equipo económico lo que podemos hacer al respecto, porque no puedo controlar la empresa, no puedo dirigir los precios de la gasolina, pero cuando sube es culpa mía”, argumentó Bolsonaro en entrevista radiofónica.
El mandatario se había mostrado contra la privatización de Petrobras, al calificar a la empresa de “estratégica” para los intereses del país.
Sin embargo, la petrolera se ha convertido en un asunto político candente, ya que los costos de la energía elevaron a dos dígitos la inflación para los consumidores brasileños, afectando a la popularidad de Bolsonaro ante las elecciones presidenciales del próximo año.
Bolsonaro firmó un decreto que “autoriza el ingreso y la permanencia temporal de las fuerzas militares de Estados Unidos en el territorio nacional para la participación en el ejercicio de adiestramiento” del 28 de noviembre al 18 de diciembre, en la región del valle de Paraíba, entre los municipios de Resende (Río de Janeiro, sureste) y Lorena (Sao Paulo, sureste).