El costo del gas licuado de petróleo (LP) se incrementó casi 14.5 por ciento a 11 semanas de que la Comisión Reguladora de Energía (CRE) implementó la fijación de precios.
Aunque el objetivo de la medida, que derivó de la Directriz de Emergencia para el Bienestar del Consumidor de Gas LP, es estabilizar el costo del energético, el insumo no ha dejado de encarecerse.
El precio promedio para la semana actual se ubicó en 25.89 pesos el kilogramo, dato superior a los 25.44 pesos reportados por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en la última semana de julio, antes de la implementación de la medida.
El costo promedio nacional del energético por litro en la semana del 10 al 16 de octubre es de 13.98 pesos, monto 41 centavos más alto respecto del observado por la Profeco hasta el 28 de julio.
En promedio, el costo del energético por kilogramo a nivel nacional ha mostrado un alza de 14.5 por ciento respecto de la primera semana de agosto, cuando comenzó a implementarse la medida. Por litro aumentó 14.4 por ciento en 11 semanas.
Sin embargo, la evolución del costo del energético, tanto por litro como por kilogramo, es diferente en las 145 regiones en las que la Secretaría de Economía (SE) dividió el país.
Aunque San Dimas, Mezquital y Pueblo Nuevo, en Durango, el precio del gas LP es más caro en todo el territorio, sólo se incrementó 6.3 por ciento en 11 semanas.
Playas Rosarito y Tijuana, en Baja California, se han distinguido por el costo más bajo en casi dos meses y medio, pero se ha encarecido 16.6 por ciento el combustible.
En el valle de México –región que incluye a la Ciudad de México y municipios del estado de México e Hidalgo– el precio del gas LP por kilogramo pasó de 21.33 pesos en la primera semana de agosto a 24.63 en el periodo actual, dato que se traduce en un alza de 15.4 por ciento.
El combustible que se vende por litro aumentó 15.4 por ciento, pues pasó de 11.52 pesos en los primeros días del octavo mes a 13.30 pesos en el actual.
Derivado del tope de precios, los comisionistas –encargados de entregar hasta los hogares el combustible– han denunciado desde los primeros días de agosto que sus ganancias se han reducido, pues pasaron de 2.50 pesos por kilogramo a menos de 50 centavos.
En ese periodo el Gremio Gasero Nacional, organización que los agrupa, llamó a paro nacional, lo cual afectó a al menos seis entidades, incluida la Ciudad de México.
Aunque concluyeron la protesta, el lunes pasado se reactivó tras no llegar a un acuerdo con la Secretaría de Energía (Sener). De acuerdo con los comisionistas, persiste el llamado al paro de actividades indefinido, hasta no tener una respuesta del gobierno federal.
Por su parte, las empresas agremiadas a la Asociación de Distribuidores de Gas LP (ADG) señalaron que no están realizando ningún paro de actividades ni protesta alguna en las calles como consecuencia del control de precios implementado por el gobierno federal.
Señaló que grupos de comisionistas –figura que no reconocen la Sener ni las empresas– han mostrado su inconformidad con la medida. Denunció que en las horas recientes estos grupos han generado actos de violencia y cierre de vialidades; además del bloqueo a sus instalaciones y rutas, lo que rechazaron.