Ciudad de México. Para evitar la corrupción en el contexto de la pandemia, la presidenta del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), Blanca Lilia Ibarra Cadena, hizo un llamado a las instituciones públicas a impulsar de manera activa esquemas de contrataciones abiertas.
“Es importante que las autoridades demos a conocer con oportunidad y claridad en qué rubros se ejerce el dinero público, cuánto se está erogando para la provisión de bienes o servicios que pueden ser vitales para el bienestar de las personas, más en los tiempos que corren, cuando enfrentamos los efectos de una crisis sanitaria que ha acelerado los procesos de contratación”, afirmó en la firma de un convenio de colaboración en materia de Contrataciones Abiertas con la Comisión Estatal para el Acceso a la Información Pública de Sinaloa (CEAIP).
Ibarra Cadena remarcó que, además de contar con la Plataforma Nacional de Transparencia, las instituciones y servidores públicos pueden poner en funcionamiento mecanismos de transparencia proactiva “que divulguen toda la información vinculada con los contratos del gobierno, tanto en la parte del desarrollo de los procesos de adquisiciones, como en las etapas subsecuentes que involucran el seguimiento y la evaluación de estos procedimientos, con las auditorías practicadas”.
El comisionado del INAI Adrián Alcalá Méndez comentó que “de acuerdo con la OCDE, en América Latina, las contrataciones públicas pueden llegar a representar hasta 12 por ciento del producto interno bruto y el 30 por ciento del gasto gubernamental. Bajo esta perspectiva, es evidente que por considerarse una actividad de alto impacto presupuestal, las contrataciones públicas representan un alto riesgo potencial de casos de corrupción”.
Añadió que la situación de emergencia para mitigar la pandemia, “no puede significar un espacio para la discrecionalidad, para la opacidad, o para justificar decisiones precipitadas o erráticas; todo lo contrario, debe representar una gran oportunidad para que la transparencia y la integridad constituyan dos de los pilares de una nueva relación entre la sociedad y el gobierno”.
Poner a disposición del público todo lo relativo a las contrataciones, enfatizó Alcalá, incentiva el monitoreo social en las compras gubernamentales y conlleva a “lógicas virtuosas” en las instituciones públicas, que ayudan a fortalecer la integridad de sus procesos de adjudicaciones o licitaciones.