Ticul, Yucatán. El infierno se desató en el municipio sureño de Ticul, al explotar una fábrica clandestina de pirotecnia que dejó dos adultos mayores muertos y daños por varios miles de pesos en ese inmueble y otras casas aledañas.
El percance provocó la movilización de bomberos, paramédicos, policías, personal de Protección Civil, incluso elementos del Ejército para contener la emergencia.
El último hecho de esta naturaleza ocurrió en la noche del 31 de diciembre de 2019 y se trató de un incendio y explosión de una fábrica y bodega clandestina de pirotecnia en la calle 6-A por 65-A de la colonia Francisco Villa Oriente, en Kanasín, municipio conurbado a Mérida, que dejó una persona muerta y tres niños lesionados.
Sobre este nuevo siniestro se informó que ocurrió en los primeros minutos de este martes en la fábrica de pirotecnia, ubicada en la calle 36 entre 15 y 17 de la colonia Mejorada de Ticul (120 kilómetros al sur del Mérida).
Una chispa habría provocado la explosión que generó un incendio de gran magnitud. La explosión y el incendio destruyeron el predio construido, en su mayoría, de bloques y techo de huano.
La explosión causó la muerte de los propietarios de la fábrica, Carlos Brito y su esposa Teresa de Jesús Chab Segura, ambos de 66 años de edad.
Unidades de bomberos de la Secretaría de Seguridad Pública, y de los municipios de Tekax, Ticul y Mérida llegaron al lugar para combatir el incendio, remover los escombros y evitar otra probable explosión.
Elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, Policía Municipal y Guardia Nacional acordonaron la zona 200 metros a la redonda y evacuaron a 70 personas de 20 predios colindantes.