Ciudad de México. La conmemoración del 56 aniversario del asalto al cuartel de Madera, en Chihuahua, generó un choque entre Morena y el PAN en San Lázaro.
La mayoría de las bancadas, incluidos los morenistas, destacaron los hechos como un legado de la lucha de líderes agrarios, estudiantes y maestros.
Armando Cabada (Morena) subrayó que hacer mención de los hechos sin reconocer los motivos que los originaron es un acto de injusticia. “Ante todo, ese movimiento fue una respuesta viva al autoritarismo y ambición de caciques, que no sólo terminaron con la repartición agraria que impulsó el general Lázaro Cárdenas, sino que despojaron de sus tierras a miles de campesinos”.
En tanto, el panista Mario Mata se enfocó principalmente en las acciones de la Liga Comunista 23 de Septiembre, posterior al asalto del cuartel militar, en 1965, y desaprobó que se les “aplauda” por considerarlos responsables de “secuestros y asesinatos”. La efeméride “no aborda un acontecimiento que invite a la reconciliación, a la paz social, a la unidad nacional”, reclamó.
El aniversario de estos hechos se incluyó ayer en los temas de la sesión del pleno. Se refieren a la primera acción insurreccional emprendida por el Grupo Popular Guerrillero, encabezado por Arturo Gámiz y Pablo Gómez Ramírez.
Como consecuencia murieron ocho guerrilleros y seis soldados. Por órdenes del gobernador Práxedes Giner Durán, los cuerpos de los primeros fueron “paseados por la ciudad en un camión”; mientras los segundos fueron sepultados con honores, recordó Jorge Armando Ortiz, del Partido del Trabajo.
“Cincuenta y seis años después, Giner Durán está en el basurero de la historia y los revolucionarios están siendo homenajeados”, agregó.
El priísta Hiram Hernández expresó que a Pablo Gómez y Arturo Gámiz, “la causa los llamó a luchar contra el abuso, la explotación, los agravios y el despojo de caciques”.