Diariamente 4.6 menores de edad desaparecen, dio a conocer la directora de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), quien destacó que 40 por ciento de estos casos ocurren en los estados de México, Tamaulipas y Jalisco, según el seguimiento de la organización. En la actualidad, del total de personas en esta condición, 16 por ciento son menores de edad pues según el reporte actualizado hay 15 mil 196 en esa condición.
Durante el seminario Infancia y desapariciones, organizado por el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, Tania Ramírez, directora de la red, destacó que el fenómeno en los adolescentes se disparó con la guerra contra el narcotráfico que inició Felipe Calderón. De acuerdo con la organización, a partir de los 12 años se incrementa sustancialmente la desaparición de menores pues tres de cada cuatro casos son mayores a esa edad.
Detalló que la cifra de casos pasó de 276 a los 12 años, a mil 576 a los 16. Esto arroja que 11 mil 368 de las 15 mil 196 niños, niñas y adolescentes reportados actualmente, es decir tres de cada cuatro menores están desaparecidos. De acuerdo con el recuento histórico (desde 1964) 52 mil 933 de 77 mil 752 eran mujeres.
Explicó que a partir de la guerra contra el narcotráfico se registró un drástico repunte de desaparición de niños y adolescentes: entre 1964 y 2005 se registraron 154; 2 mil 308 entre 2007 y 2012 y se alcanzó el pico con el gobierno de Enrique Peña: 6 mil 160 entre 2013 y 2018.
Ramírez mencionó que uno de cada cinco niños y adolescentes desaparecidos se registran en el estado de México (3 mil 476 de los 15 mil 196 que se encuentran en el reporte actualizado); uno de cada 10 desaparecen en Tamaulipas, en tanto que el 7.5 por ciento del total ocurrieron en Jalisco. Esto es, según Redim, 40 por ciento del total de desapariciones de menores de edad se registraron en estas tres entidades.
De acuerdo a la Redim, afortunadamente en el caso de los menores, el 80.5 por ciento de los desaparecidos son localizados y solamente uno de cada 100 es encontrado sin vida.