El patio de trabajo de la histórica sede de la Secretaría de Educación Pública (SEP), enmarcado por los murales que Diego Rivera dedicó a los oficios y donde se erigen las estatuas de José Vasconcelos y Jaime Torres Bodet, fue escenario para la celebración oficial por el centenario de la dependencia.
Desde ese espacio, la actual titular de la dependencia, Delfina Gómez Álvarez, comprometió los esfuerzos del gobierno de la Cuarta Transformación para llevar la educación a los sectores más vulnerables –así sea al rincón más inhóspito de la República–, pues se trata de un principio y una meta para la construcción de un nuevo país.
La SEP, aseveró, estará con cada niño y adolescente que desee y necesite estudiar, “porque es tiempo de cumplir a los más desprotegidos y a quienes fueron marginados y olvidados por décadas”.
Informó que los festejos por los 100 años de la dependencia incluirán el inicio, el 22 de octubre en Veracruz, de una campaña nacional de alfabetización, pues poco más de 4 millones de personas en el país no saben leer ni escribir. “Estoy segura de que, así como hace un siglo, cuando las maestras y los maestros acudieron con fervor el llamado de Vasconcelos, hoy lo harán para educar a nuestro pueblo más necesitado”, indicó.
Los oradores centraron sus palabras en el reconocimiento a los pilares del sistema de educación pública del país: los docentes. Con sus palabras para el magisterio, Mercedes Nohemí Martínez de la Cruz, estudiante de secundaria del municipio de Hueyapan, tocó las sensaciones de los presentes, al grado de que algunos lagrimearon por instantes.
Al acto acudió el diplomático y hoy senador Héctor Vasconcelos, hijo de José Vasconcelos, hombre que empeñó sus esfuerzos para fundar la SEP. Ese sueño se concretó el 3 de octubre de 1921, por decreto presidencial de Álvaro Obregón.
La secretaria Gómez rompió el protocolo y lo invitó a subir al estrado para dirigir un mensaje. El heredero del fundador de la SEP calificó a la institución de “uno de los pilares y fundamentos” del país, y enfatizó que con su creación surgió por primer vez en la historia de México un esfuerzo federal para atender y llevar la instrucción a todos los sectores sociales.
Previamente, como parte del programa, Vasconcelos interpretó el movimiento andante del Concierto para piano no. 21 de Mozart, acompañado por la Orquesta Sinfónica del Instituto Politécnico Nacional.
Más adelante, en una pausa a los discursos, la agrupación musical también interpretó, como estreno absoluto, la pieza titulada Ce, ome, eyi, de los maestros Eduardo Ángulo (música) y Mardonio Carballo (letra), y cerró el festejo con los acordes de Danzón no. 2, de Arturo Márquez.
En representación del presidente Andrés Manuel López Obrador –quien no asistió a esta celebración–, la titular del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, María Elena Álvarez-Buylla, apuntó que a lo largo de su historia la SEP alcanzó notables avances para la educación en el país, como el combate al analfabetismo, la construcción de escuelas de todos los niveles académicos, becas y la institucionalización del libro de texto gratuito.