En lo que va del año, la nación ha experimentado graves impactos por el cambio climático con las sequías que han puesto a nuestro país en estado de emergencia, incendios forestales de mayor magnitud y frecuencia, así como huracanes, lluvias torrenciales e inundaciones, advirtió Pablo Ramírez, especialista en Energía y Cambio Climático de Greenpeace México.
Mencionó que existen comunidades que han decidido tomar acciones para adaptarse a los impactos de la crisis climática y hacer cambios que beneficien a sus comunidades.
En Tepeji del Río, Hidalgo, el nivel de las presas ha llegado al mínimo histórico en los últimos seis años, de acuerdo con habitantes que viven de la pesca. Sin embargo, enormes cantidades de agua contaminada proveniente de la Ciudad de México llegan cada día a la región, para ello el Fideicomiso de Infraestructura Ambiental de los Valles Hidalgo desarrolló sistemas de saneamiento de agua a pequeña escala, alimentados con energía solar, que benefician directamente al acceso al agua para las comunidades, explicó Ana Lilia Velasco, integrante de esa instancia.
En tanto, Río Playa, en Tabasco, enfrenta cada vez inundaciones más severas y la entrada de agua salada a sus tierras que ha afectado directamente las formas de sustento del ejido, comentó Rutilio Hernández, ejidatario de esa localidad.
En respuesta, la comunidad siembra mangle blanco para filtrar el agua salada y la contaminación ocasionada por la industria petrolera que los rodea (el ejido es vecino del predio donde se construye la refinería de Dos Bocas) y como barrera para las inundaciones y huracanes que azotan la región.