Washington. Un impago de deuda por parte de Estados Unidos –un escenario abierto ante la falta de acuerdo en el Congreso para elevar el límite de endeudamiento del país antes del 18 de octubre– amenaza con provocar una nueva recesión, advirtió el martes la secretaria del Tesoro estadunidense.
“Prevemos que provoque una recesión”, dijo Janet Yellen en una entrevista en la CNBC. Los republicanos se niegan a votar para aumentar el nivel máximo de deuda del país, un procedimiento que suele ser rutinario.
Yellen advirtió anteriormente que Estados Unidos no tendrá fondos para cumplir sus obligaciones con los acreedores después del 18 de octubre si el Congreso no flexibiliza el techo de deuda del país. Este procedimiento normalmente es una formalidad y suele aprobarse con un acuerdo bipartidista.
Rechazó la idea de acuñar una moneda de un billón de dólares para evitar un impago. Dijo que si ocurriera un incumplimiento de pago “esperaría que cause una recesión también”, además de impedir que el gobierno pague prestaciones a 50 millones de beneficiarios del Seguro Social y evitar que cumpla con los demás proyectos de ley del gobierno.
La funcionaria consideró que sería “catastrófico” si el gobierno no tiene los recursos para pagar sus facturas. Rechazó rotundamente una idea que se ha propuesto: acuñar una moneda de un billón de dólares y utilizarla para evitar un incumplimiento de la deuda. “Me opongo y no creo que debamos considerarlo en serio”, apuntó. “La moneda de platino equivale a pedirle a la Fed (banco central) que acuñe dinero para cubrir la deuda”, afirmó.
La secretaria del Tesoro, Janet Yellen, ha dicho que el gobierno agotará su capacidad de endeudamiento alrededor del 18 de octubre si el Congreso no eleva para entonces la capacidad de endeudamiento del país, de 28.4 billones de dólares (un monto que, comparativamente, multiplica por 23 el valor de la economía mexicana, que es equivalente a 1.2 billones de dólares).
Este año los republicanos se niegan a votar a favor del proceso casi rutinario de elevar el techo de deuda y prometen incluso bloquear la posibilidad de que los demócratas aprueben esta medida con sus propios votos, una muestra más de la acritud que reina en Washington.
En su lugar, los republicanos del Senado están intentando obligar a los demócratas a utilizar una compleja maniobra llamada reconciliación para que asuman, en exclusiva, la responsabilidad del aumento de la deuda.
Los demócratas se niegan hasta ahora a aceptar esta medida, y acusan a los republicanos de tomar como rehén la situación financiera de la nación.
El presidente estadunidense, Joe Biden, calificó el lunes a los opositores republicanos de “imprudentes y peligrosos” por negarse a unirse a los demócratas para elevar el límite de la deuda.