Pizarra empatada en la novena entrada, dos outs, hombre en primera y el último turno al bateo. Un guion listo para el drama del beisbol y justo así fue el desenlace memorable con el jonrón de Chris Taylor, quien recorrió las almohadillas con una sonrisa eterna. Dodgers venció así en el último episodio por 1-1 a Cardenales de San Luis y avanzó a la serie divisional de la Liga Nacional donde enfrentarán a los Gigantes de San Francisco.
Un duelo largo y dramático, como exigen los aficionados, con lanzadores precisos que impidieron los ataques en la caja de bateo durante el juego de comodines. Un partido sin desperdicio y sin mañana, donde ambos se jugaban la vida.
San Luis empezó anotando desde la primera entrada. Tommy Edman aportó la primera carrera propiciada por el picheo descontrolado del abridor de los Dodgers Max Scherzer.
El duelo de montículo se mantuvo hasta el cuarto rollo cuando la novena de Los Ángeles empató la pizarra tras un jonrón que pegó el pelirrojo Justin Turner. Un tablazo que se fue a 122 metros para provocar una fiesta de gorras azules en las gradas del estadio de los Dodgers.
El duelo siguió con lanzadores de nervios de acero. El mexicano Giovanni Gallegos trabajó un rollo impecable, con un hit y dos ponches. La victoria fue para el relevista Kenley Janse, quien en un inning tiró inspirado y recibió un imparable y recetó tres chocolates.
Y llegó el clímax del último turno en la novena entrada, con dos outs. Con un cuadrangular, Taylor puso el punto final a un poema épico.