Ciudad de México. Derivado de lo expuesto por la indagatoria periodística internacional Pandora Papers, la organización religiosa Legionarios de Cristo, insistió en que “no hay nada ilegal”, ni menos algo “oculto”
Precisó que de los fideicomisos que se les atribuyen, dos son algo personal de uno de sus integrantes y el tercero, sí pertenece a la congregación, pero tiene como fin recaudar y distribuir recursos para atender a sacerdotes ancianos o enfermos.
Aseveró que “los Legionarios de Cristo administra sus recursos cumpliendo con todas las leyes en cada país donde tiene presencia, y la legislación canónica” y explicó que “el Retirement and Medical Charitable Trust (RMCT) es un fideicomiso establecido por la congregación de los Legionarios de Cristo (en Nueva Zelanda) para recibir donativos y destinarlos especialmente al cuidado de la salud de sacerdotes y personas consagradas, especialmente los ancianos, o a otros fines religiosos, caritativos y educativos”.
Aseguró que el RMCT “no conserva patrimonio y carece de activos más allá de lo que se requiere para cubrir gastos relacionados con su operación. Todos los donativos obtenidos por el fideicomiso ya fueron destinados según las finalidades establecidas. Ordinariamente, esto sucede a los pocos días o semanas después de recibir una contribución. El fideicomiso nunca se ha usado para invertir fondos de la congregación”.
Así mismo, la orden fundada por el sacerdote pederasta, Marcial Maciel expresó que en 2011 uno de sus sacerdotes (del cual no proporciona el nombre, pero es el regiomontano Luis Garza Medina), junto otros miembros de su familia (dos hermanos) establecieron dos fideicomisos irrevocables en Nueva Zelanda con bienes de su patrimonio familiar, confiándolos a administradores y protectores que los deben gestionar según los fines para los que fueron creados”.
Sostuvo que esos dos fideicomisos “son independientes de nuestra congregación”, pues se habrían fondeado con dinero producto de una herencia familiar (el religioso pertenece a una conocida familia de empresarios).
Por ello “la congregación nunca ha controlado ni sus fondos, ni sus términos, ni sus operaciones, ni sus inversiones, ni determina en modo alguno el destino de sus fondos. Es importante distinguir debidamente entre la congregación y estos dos fideicomisos que no fueron creados ni son controlados por la congregación”.
Afirmó que los Legionarios de Cristo, como es habitual en la mayor parte de las órdenes religiosas, “no controla los bienes de sus religiosos, ni los administra, ni es dueña de ellos, a no ser que el religioso haga donación de sus bienes”, o algún tipo de préstamo, lo cual ha ocurrido.
Garza Medina fue electo vicario general de la Legión en 1992 y en 2005, y renunció en 2011. De 1988 a 1991 fue director territorial de México y de 2011 a 2014 fue director territorial de Norteamérica. Es ingeniero industrial por la Universidad de Stanford y doctor en derecho canónico por la Pontificia Universidad Gregoriana en Roma.
La orden precisó que la función del fideicomiso RMCT es pedir y recibir donativos, y destinarlos según la finalidad establecida y la intención del donante, “observando las reglas internacionales de contabilidad, los estándares de auditoría, transparencia para donadores y las regulaciones aplicables de impuestos”. Así, según esa función, en los últimos años, “el fideicomiso RMCT ha hecho peticiones de donativos a los dos fideicomisos creados por este sacerdote y su familia, y los fideicomisos han decidido por su propia cuenta si otorgan o no el apoyo solicitado. Los donativos recibidos ya fueron destinados según la finalidad establecida”.
Aclaró que en algunos casos, “instituciones relacionadas con los Legionarios de Cristo han pedido préstamos a los dos fideicomisos creados por este sacerdote y su familia para financiar proyectos” y la orden “está pagando a los dos fideicomisos la devolución de préstamos que recibió de este sacerdote tiempo antes de que él y su familia crearan los fideicomisos. Este sacerdote (Garza Medina) solicitó a la Congregación que la devolución de los préstamos se pagara a los fideicomisos creados por él y su familia”.
Explicó que luego de la Visita Apostólica ordenada por el papa Benedicto XVI (por los escándalos de abusos sexuales contra menores de edad), el cardenal Velasio De Paolis fue nombrado delegado pontificio para la Congregación de los Legionarios de Cristo.
“Durante ese período, que abarca del año 2010 al 2014, se constituyó la Comisión para el estudio y revisión de la situación económica de la Congregación de los Legionarios de Cristo”.
Detalló que esa comisión tenía la finalidad de analizar la gestión económica y la situación financiera de la Legión.
“El informe fue presentado al Capítulo general en 2014”, y “no se encontraron malversaciones de dinero u otras irregularidades en los ejercicios fiscales revisados”.
El Capítulo general, presidido por el delegado pontificio de Paolis, como autoridad suprema de la congregación, “tuvo a su disposición la documentación amplia y detallada preparada por el administrador general y el informe de las auditorías internas y externas de las operaciones financieras de la orden en todo el mundo”.