Moscú. En una primicia histórica, Rusia está lista para lanzar a una actriz y un director de cine al espacio con el objetivo de filmar un largometraje en órbita, proyecto que el jefe espacial de la nación ha aclamado como oportunidad para elevar el prestigio del programa espacial de ese país.
La actriz Yulia Peresild y el director Klim Shipenko despegan este martes hacia la Estación Espacial Internacional en una nave rusa Soyuz, junto con el cosmonauta Anton Shkaplerov, veterano de tres misiones espaciales. Después de 12 días en el puesto de avanzada espacial, Peresild y Klimenko regresarán a la Tierra con otro cosmonauta de su misma nacionalidad.
Planean filmar segmentos de una nueva película titulada Challenge, sobre un cirujano convocado a la estación espacial para salvar a un miembro de la tripulación que sufre una enfermedad cardiaca.
En conferencia de prensa en el centro de lanzamiento de Rusia en Baikonur, Kazajstán, Peresild reconoció que el entrenamiento para la misión fue agotador, aunque lo describió como oportunidad única.
“Es un milagro”, dijo la actriz de 37 años. “Trabajamos muy duro y estamos muy cansados, aunque nos mantenemos de buen humor. Fue sicológica, física y moralmente difícil, pero creo que una vez que logremos el objetivo, todo eso no nos parecerá tan difícil y lo recordaremos con una sonrisa”.
Agregó que le resultó difícil adaptarse a la estricta disciplina y las rigurosas exigencias requeridas durante el entrenamiento. “Fue bastante duro al principio, cuando no tienes muchas opciones: sólo ve, corre, ve más rápido, espera, continúa. No fue fácil y sí bastante inesperado, pero lo hemos superado”.
Desafíos
Agregó que aprender sobre el diseño y el manejo de la nave espacial fue la parte más desafiante. “Para ser honesta, no me resultó fácil”, dijo. “Durante las dos primeras semanas estudiaba hasta las 4 de la mañana todas las noches. Hay tantos acrónimos, y si no te aprendes todos, no entenderás nada más adelante”.
Lo que más le gustó del entrenamiento fue un vuelo que imitaba la ingravidez, en el que un avión desciende en picada para permitir a los que están dentro unos 20 segundos en gravedad cero. Añadió que sabe que ésta, en órbita podría ser completamente diferente y que se está preparando para su primera mañana en esas condiciones.
“Algunas mañanas pueden ser difíciles, incluso en la Tierra”, dijo. “Pensamos mucho en ello y los cosmonautas compartieron algunos trucos de vida”.
Shipenko, de 38 años, ha hecho varias películas de éxito comercial, incluida Kholop (Serf) de 2019, que estableció un récord de taquilla en Rusia. También describió el entrenamiento como duro.
Uno de los largometrajes anteriores de Shipenko, Salyut-7, contaba la historia real de una desafiante misión en 1985 de dos cosmonautas soviéticos enviados para resucitar una estación abandonada.
Describió el curso de capacitación de cuatro meses como muy intenso. Agregó que está encantado de ser el primer cineasta en el espacio y está interesado en experimentar con la iluminación, la configuración de la cámara y otros aspectos.