Con la participación de jerarcas de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), integrantes de organizaciones provida marcharon desde el Auditorio Nacional hasta el Ángel de la Independencia, donde, en el templete que instalaron, un ginecólogo realizó un ultrasonido a una adolescente con 38 semanas de gestación.
Asimismo, propusieron el establecimiento de “un gran acuerdo nacional” para proteger la vida y criticaron la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, del pasado 7 de septiembre, que declaró inconstitucional la penalización del aborto.
A la denominada Marcha a Favor de la Mujer y la Vida, se sumó Alfonso Miranda Guardiola, secretario general de la CEM; Jesús Herrera Quiñones, responsable de la Dimensión Episcopal de Vida del organismo eclesial, y Salvador Rangel Mendoza, obispo de Chilpancingo-Chilapa.
A la movilización, que concentró a unas 9 mil personas, según estimaciones del gobierno capitalino, también acudieron monjas, sacerdotes, seminaristas y feligreses de otras denominaciones religiosas.
Durante el trayecto, algunos creyentes, con rosarios en mano, crucifijos e imágenes religiosas, entre ellas de la Virgen de Guadalupe, se hincaban para orar por la protección de la vida desde la concepción hasta la muerte natural.
Al llegar al Monumento a la Victoria Alada, se expusieron testimonios en contra del aborto. Ahí el ginecólogo Fernando realizó a Ana, adolescente de 15 años, un ultrasonido en el escenario, cuyas imágenes y latidos del corazón se transmitieron a través de las pantallas gigantes instaladas alrededor del templete.
La protesta se realizó en 70 ciudades de forma simultánea, en estados como Chihuahua, Sonora, Nuevo León, Jalisco, Nayarit, Guerrero y Quintana Roo.
En Sonora, los feligreses se congregaron en Congreso local y el Poder Judicial para rezar un rosario y en Nayarit la protesta la encabezó el obispo de la diócesis de Tepic, Luis Artemio Flores Calzada.
En la misa dominical encabezada por el cardenal Carlos Aguiar Retes, arzobispo Primado de México, y el semanario católico Desde la Fe, se respaldó la movilización provida, la que según sus organizadores congregó a “150 mil participantes”.
Con información de corresponsales