Apizaco, Tlax., Trabajadores del sector salud de Tlaxcala y sindicalizados de la empresa Amatech se manifestaron ayer para solicitar la intervención del presidente Andrés Manuel López Obrador en los conflictos que enfrentan en torno a la asignación irregular de plazas y la huelga que iniciaron el pasado 27 de septiembre, respectivamente.
Los empleados de Amatech se instalaron afuera del plantel 10 del Colegio de Bachilleres de Tlaxcala, donde el mandatario encabezó una ceremonia, en demanda de “salarios justos”, “justicia laboral” y “trato digno”, luego de que colgaron las banderas rojinegras en ese call center, donde laboran 3 mil 200 personas.
El secretario general seccional del sindicato en Amatech, Alejandro Grande, informó que ese organismo, adherido a la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos, comenzó la huelga porque la parte patronal ofrece 3 por ciento de incremento salarial, lo que consideran “una burla”, pues la base trabajadora demanda más de 6 por ciento.
En tanto, personal suplente y eventual de la Secretaría de Salud solicitó la intervención de López Obrador para que el gobierno estatal realice un proceso de homologación y de incremento salarial, con el argumento de que el pago que reciben es poco en relación con el trabajo que desempeñan.
Mayra Rugerio, enfermera del Hospital General de Tlaxcala, explicó que también piden la intervención del mandatario “para erradicar la corrupción que prevalece” en la sección 27 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud, cuya dirigente, Blanca Águila, habría entregado bases a personas afines.
Por su parte, Perfecto Barrales, presidente del Sistema Producto Amaranto en el estado, demandó el apoyo del Ejecutivo federal para evitar que empresas adquieran mil 500 hectáreas del ejido de Cuapiaxtla, a fin de destinarlas a prestar servicios a la armadora alemana Audi.