Madrid. Miles de personas marcharon ayer en Barcelona, a cuatro años del referendo de autodeterminación en Cataluña, que aunque prohibido por la justicia tuvo lugar el 1º de octubre de 2017, pocos días antes de una fallida declaración de independencia.
Con banderas y pancartas en las cuales se leía: “Hemos ganado”, la manifestación también sirvió para brindar apoyo a Carles Puigdemont, ex presidente catalán, quien hoy se presentará ante la justicia italiana por el pedido de detención y extradición a España.
Eurodiputado desde 2019, Puigdemont reside en Bélgica, adonde huyó después de la liderar la fallida secesión de Cataluña. España lo busca por sedición y malversación de fondos.
“Los que estamos a favor de la independencia no nos hemos bajado del carro y hace falta que el gobierno (catalán), que tiene mayoría independentista, se moje de una vez, tome partido y aplique lo que votamos, que es la declaración unilateral de independencia”, declaró en la manifestación a AfpTV Jordi Riba, bombero de 50 años.
De acuerdo con cifras de la Guardia Urbana de Barcelona, unos 3 mil independentistas se congregaron al mediodía en la plaza Francesc Macià y marcharon por la avenida Diagonal, una de las principales arterias de la ciudad.
La Asamblea Nacional Catalana (ANC) convocó a los simpatizantes del movimiento soberanista de Cataluña a culminar la celebración del cuarto aniversario del referendo, al que dos días después siguió una huelga general de protesta.
Más de 2.2 millones de catalanes participaron en la consulta de autodeterminación, que fue declarada ilegal por la justicia española, y en la cual 90 por ciento votó a favor de la separación de España.
Por lo pronto, Puigdemont llegó ayer a Cerdeña para preparar la audiencia de hoy, confirmó su abogado Gonzalo Boye.
El ex mandatario catalán fue detenido el 23 de septiembre por la policía italiana y liberado tras pasar 24 horas en la cárcel.
En esta ocasión el líder independentista superó sin ningún problema la entrada y fue saludado por varias personas que lo esperaban a la salida del aeropuerto, según imágenes divulgadas por la televisión local.
“Está aquí, con Toni Comín y Clara Ponsatí”, precisó Boye, al referirse a dos eurodiputados sobre los cuales pesan las mismas órdenes europeas de detención emitidas por España.
Puigdemont prepara con sus abogados la delicada audiencia, ya que las autoridades judiciales italianas deberán determinar si la decisión de la corte de dejarlo en libertad, con plena facultad de movimientos, es definitiva.
El equipo legal del líder independentista presentó el viernes ante la justicia europea un pedido de medida cautelar para que se deje en suspenso el levantamiento de su inmunidad parlamentaria
El jueves, el juez de la causa en España, Pablo Llarena, remitió un documento a la justicia italiana en el cual insistió en que las órdenes de arresto continúan vigentes y que el líder catalán debía ser extraditado.