Representantes vecinales, comerciantes y empresarios criticaron la “entrada faraónica” de Sandra Cuevas a la alcaldía Cuauhtémoc en un momento en el que las familias enfrentan carencias económicas, falta de empleo e incertidumbre.
La “falta de sensibilidad traicionó la confianza que se depositó, porque sabemos que si las cosas no cambian, la experiencia nos dice que resultan peor”, dijo Quetzal Castro, de la colonia Hipódromo.
El compromiso que asumió abiertamente con vendedores, a quienes dijo que si se oponen no violentará sus derechos porque “no hay nada mejor que ser comerciante”, impactó en diferentes puntos de la alcaldía ante la invasión de plazas, calles y avenidas.
No sólo fue la declaración, porque Cuevas agradeció públicamente a lideresas como Silvia Sánchez Barrios su apoyo, aunque no fue la única, aseguraron habitantes de Santa María la Ribera, porque sus últimas reuniones fueron con organizaciones del comercio informal a pesar de que se comprometió a retirarlos.
En las colonias Juárez, Roma, Condesa, Hipódromo, Santa María la Ribera, Centro y otras, la principal queja es la ocupación de calles, que justo durante la campaña creció de forma desordenada.
Rafael Guarneros, otro represente, reconoció que se vive una situación difícil: “Hay que ser sensibles y ver la realidad que generó la pandemia. La necesidad de la gente por trabajar, pero hay que poner orden y generar otro tipo de fuentes de empleo”.
Aseguró que los nuevos puestos no son de gente con necesidad, pues son estructuras de 30 a 40 mil pesos, por lo cual dijo que no son personas pobres, sino empresarios que se extienden.
En Tepito también hay descontento porque se empodera a algunos líderes y no se es parejo.
La presencia de algunos funcionarios que se comprometió a retirar por la corrupción detectada en la alcaldía, también causó malestar entre vecinos al ver la noche del viernes a Salvador Santiago, El Chava, a quien identifican como quien controla la calle y los cobros desde la alcaldía.