Aunque la estrategia del actual gobierno de ofrecer disculpas a las comunidades yaquis y restituirles sus territorios históricos es adecuada, también es necesario que dichas acciones se extiendan a todos los pueblos originarios del país y se enmarquen dentro de una reforma constitucional que reconozca la autonomía y autodeterminación de los indígenas, señalaron activistas e investigadoras especializadas en el tema.
Angélica Rivadeneyra Villarreal, presidenta y fundadora de la organización Testimonio Social de Ética Revolucionaria, estimó que la iniciativa del mandatario Andrés Manuel López Obrador hacia los yaquis es “excelente”, pero subrayó la necesidad de que este tipo de iniciativas formen parte de un esquema legal más complejo e integral.
Erradicar el paternalismo
“Si seguimos en esta vía paternalista de decir ‘pobrecitos pueblos, vamos a darles un poquito’, no vamos a avanzar. Lo que se tiene que hacer es una reforma constitucional de fondo, de reconocimiento de la autonomía y autodeterminación de los pueblos indígenas, y que se respeten sus formas culturales y sistemas normativos”, señaló.
La especialista en temas de pobreza y desarrollo social consideró que estas mismas acciones de resarcimiento de daños deben realizarse con todos los demás pueblos originarios de México, quienes se han visto perjudicados de diversas formas por minas, presas y otros megaproyectos.
Por su parte, Cecilia Osornio Tepanécatl, investigadora especializada en temas de territorios indígenas y estudios socioculturales, coincidió en que el reconocimiento de derechos debe extenderse al resto de las colectividades originarias del país, ya que prácticamente todas ellas han sufrido despojo y violencia, incluso desde antes de la fundación del Estado mexicano.
Manifestó que es necesario revisar las condiciones legales de posesión de la tierra de cada pueblo indígena y definir si es de propiedad comunal o ejidal, para entender las dimensiones materiales, simbólicas e históricas de cada proceso de restitución de derechos.
Osornio sugirió que una comisión externa a los pueblos yaquis y el gobierno de México le dé transparencia al actual proceso de resarcimiento de daños, y dijo esperar que el tema “no se quede solo en promesas. Hay que hacer una reflexión histórica de los procesos de estos pueblos y de nuestra relación con ellos”.