Londres. Un policía de Londres fue sentenciado este jueves a cadena perpetua por el secuestro, violación y asesinato de una mujer en un caso que conmocionó a la nación.
Wayne Couzens, de 48 años, fue acusado de usar su identificación policial y aprovechar las restricciones contra el Covid-19 para engañar a Sarah Everard, de 33 años, para que subiera a su automóvil en un arresto falso mientras ella caminaba de regreso a casa después de visitar a una amiga en el sur de Londres el tres de marzo. Couzens esposó a Everard con el pretexto de que violó las normas del encierro, la llevó lejos de la capital y luego la violó y mató.
Couzens se declaró culpable de los cargos de secuestro, violación y asesinato.
El juez Adrian Fulford dijo que las circunstancias del caso son “devastadoras, trágicas y totalmente brutales”. Dijo que Couzens fue “a cazar a una mujer solitaria para secuestrarla y violarla”, después de planear el crimen con lúgubre detalle, “más allá de las palabras”.
El cuerpo de Everard fue encontrado en un bosque en Ashford, Kent, a casi 100 kilómetros (60 millas) al sureste de Londres, una semana después de su desaparición. Los fiscales dijeron que Couzens la estranguló antes de prenderle fuego al cuerpo.
Couzens ingresó a la Policía Metropolitana en 2018 y formó parte de un equipo que protegía sedes diplomáticas en el centro de Londres. Había trabajado un turno nocturno en la embajada de Estados Unidos el día que secuestró a Everard.
La Policía Metropolitana se ha dicho “enferma, enojada y devastada” porque uno de los suyos fue responsable del crimen.
A raíz del asesinato, se plantearon muchas preguntas sobre la confianza en la policía y cómo la fuerza examina a sus agentes. Algunos también criticaron a Scotland Yard por no hacer lo suficiente para proteger a las mujeres y las niñas y abordar las acusaciones de violencia sexual.
Después del arresto de Couzens, se supo que fue acusado de exposición indecente al menos dos veces antes de asesinar a Everard, y se está investigando a la policía para ver si trató las acusaciones adecuadamente.