El Plan de justicia del pueblo yaqui, firmado ayer por el presidente Andrés Manuel López Obrador y los ocho gobernadores tradicionales, establece acciones encaminadas a dar garantía legal sobre las tierras, cuidado del agua y medio ambiente, así como una estrategia para el desarrollo integral de la zona.

Por su parte, los representantes de los pueblos Vícam, Pótam, Tórim, Cócorit, Pitahaya (Belem), Ráhum, Huírivis y Bácum, entregaron al mandatario una iniciativa de reforma constitucional sobre derechos de los pueblos indígenas y afromexicanos, respaldada con 650 mil firmas, para que sea enviada al Congreso.

En la propuesta se integran los términos de “pluriculturalidad, interculturalidad y pluralismo jurídico”; se reconoce a los pueblos y comunidades indígenas como sujetos de derecho público con personalidad jurídica y patrimonio propio, y define que el Estado debe asignar recursos de manera directa y equitativa a los pueblos indígenas para que éstos los administren.

Mientras que, como parte del plan de justicia se detalla que son 46 las comunidades que integran los ocho pueblos yaquis, en los que habitan 42 mil 200 personas, la mitad de hogares indígenas.

En el documento se establece resarcir a los pueblos “la superficie que implique la diferencia entre el decreto de 1940 emitido por el general Lázaro Cárdenas y la ejecución de 1997, que corresponde a una superficie superior a las 20 mil hectáreas”. También se define regularizar la superficie aproximada de 8 mil 800 hectáreas que el pueblo yaqui “ha recuperado y que tiene en posesión”.

Se crearán tres mesas de trabajo para la identificación de presuntas pequeñas propiedades; de superficies en posesión de particulares, y de tierras nacionales que serán puestas a su disposición con procedimientos que ya inició la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano.

El titular del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, Adelfo Regino Montes, detalló que “como un primer acto para honrar este compromiso”, el presidente López Obrador firmó un decreto para la devolución de 2 mil 943 hectáreas para que sean parte de su patrimonio territorial, a título comunal.

Garantiza derecho al agua y cuidado al ambiente.

Durante la firma del plan en Sonora se anunció la construcción de un acueducto con una longitud de 158 kilómetros, que va ir desde la presa del Oviachic hasta Bahía de Lobos, y “se analizan las acciones para devolver el agua al sagrado río Yaqui, de modo que se pueda recuperar el ecosistema y también fortalecer la cultura y la espiritualidad del pueblo yaqui”.

También se creó el distrito de riego número 18 y su inmediata transferencia al pueblo yaqui, mismo que representa una superficie de 126 mil 259 hectáreas. De manera paralela, en Vícam Pueblo se construye la Universidad del Pueblo Yaqui, y se proyecta un hospital regional y seis unidades médicas rurales.

Para los distintos proyectos se perfila una inversión inicial de 11 mil 600 millones de pesos, de los cuales en este año ya se está ejerciendo mil 500 millones de pesos.