Una ola de aversión al riesgo se vivió en la jornada financiera de este martes, con caídas en las plazas financieras neoyorquinas que llegaron a rebasar 2 por ciento. Al temor al alza de la energía, que revivió las presiones inflacionarias, se sumó la falta de acuerdo entre republicanos y demócratas para evitar el cierre parcial de la administración en Estados Unidos, una vez que ese país alcance el techo de deuda que tiene autorizado a contratar y entre en riesgo de incumplir sus compromisos por primera vez en la historia.
Los inversionistas en todo el mundo aceleraron las ventas en los mercados accionarios y de divisas, principalmente emergentes; los mensajes de tranquilidad lanzados por la Reserva Federal (Fed) y el Banco Central Europeo (BCE), asegurando que el repunte de la inflación es algo transitorio, no fueron suficientes para devolver la calma a los mercados, cuyos participantes se refugiaron en los bonos del Tesoro, provocando el incremento de su rendimientos, lo que provocó el fortalecimiento del dólar.
Como señaló la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, si no se eleva el techo de deuda de Estados Unidos, la institución que dirige se quedaría sin fondos para cumplir con sus obligaciones, pues los recursos para financiarse se agotarían el 18 de octubre.
“Es imperativo que el Congreso solucione rápidamente (la cuestión de) el tope de endeudamiento. De lo contrario, Estados Unidos entrará en default por primera vez en su historia”, advirtió Yellen.
Durante el gobierno de Barack Obama (2009), la parálisis política en el Congreso por este asunto llevó a la agencia calificadora Standard and Poor’s a retirar la nota máxima “AAA” a la deuda estadunidense, lo cual sacudió a los mercados. Hace un año, Fitch previno al soberano estadunidense de que si no se aprueba el techo de la deuda estaba en riesgo su triple “A”.
Así, en Wall Street, el Dow Jones cayó 1.63 por ciento; mientras el Nasdaq perdió 2.83 por ciento. En vísperas de que termine septiembre, el índice tecnológico va camino de firmar su peor mes en el año. En tanto, el S&P 500 cedió 2.04 por ciento.
En La Bolsa Mexicana de Valores (BMV), el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) retrocedió en la jornada, en línea con Wall Street, 1.30 por ciento, a 50 mil 925.52 puntos, afectado por la caída del precio de las acciones de Peñoles, 5.62 por ciento; Pochtec, 4.05; Walmart, 3.34; Traxión, 2.92, y Nemak, 2.89 por ciento; entre los más relevantes.
Asimismo, las dudas que existen entorno a la flexibilidad de la Fed y el BCE con la inflación llevó al bono de Estados Unidos a dos años a subir a 0.3 por ciento, niveles de marzo de 2020, y al de 10 años a 1.53 por ciento, cercano a niveles máximos en más de tres meses.
Peso, el más depreciado
Ante la demanda de dólares, la divisa mexicana cerró este martes en el mercado interbancario con una depreciación de 1.31 por ciento frente a su similar estadunidense, respecto al cierre previo, equivalente a 26.3 centavos, a 20.3710 pesos por dólar spot.
El peso mexicano estuvo dentro de las tres monedas emergentes que más se depreció, antes del peso chileno y del rand sudafricano.