Los Ángeles., La estrella estadunidense de gimnasia Simone Biles aseguró que debió renunciar a Tokio 2020 “mucho antes” de la cita olímpica, en la que desistió de competir en cuatro finales para proteger su salud mental y física.
“Si miras todo lo que he pasado durante los siete años recientes, nunca debería haber formado otro equipo olímpico. Lo debí haber dejado mucho antes de Tokio”, dijo Biles, de 24 años, en una entrevista a la revista New York Magazine.
La expectativa razonable era que Biles dominara en Tokio 2020 el concurso individual del torneo olímpico de gimnasia, como lo hizo en Rio de Janeiro 2016, pero sorprendió al mundo cuando abandonó a mitad de la competencia en la final general por equipos.
Considerada como la mejor de todos los tiempos y favorita a ganar varias medallas de oro en Tokio, Biles señaló que se retiró para priorizar su salud mental tras sufrir un ataque de twisties, fenómeno potencialmente peligroso que hace que las gimnastas pierdan el sentido de la orientación cuando están en el aire.
“Es básicamente de vida o muerte”, explicó; “es un milagro que aterrizara de pie. Si fuera cualquier otra persona, habría salido en camilla. Tan pronto como aterricé, fui y le dije a mi entrenador: ‘No puedo continuar’”.
Sobreviviente de abuso sexual, Simone le dijo a la revista que el escándalo del doctor Larry Nassar, ex médico del seleccionado femenino estadunidense de la disciplina, tuvo en ella un impacto emocional abrumador.
“Fue demasiado. Pero no iba a dejar que se llevara algo por lo que había trabajado desde que tenía seis años. No dejaría que me quitara esa alegría. Así que lo superé todo lo que mi mente y mi cuerpo me lo permitieron”, señaló.
Larry Nassar cumple condena de cadena perpetua por agresiones sexuales a más de 250 gimnastas, en su mayoría menores, cometidas en la Federación, en la Universidad estatal de Michigan y en un gimnasio en Lansing donde trabajaba.