Los Angeles. Una jueza suspendió este miércoles al padre de Britney Spears de la tutela que ha controlado la vida y el dinero de la cantante por 13 años, argumentando que el acuerdo “refleja un ambiente tóxico”.
La jueza del Tribunal Superior de Los Angeles, Brenda Penny, estuvo de acuerdo con la petición de Spears y su abogado, Mathew Rosengart, sobre que James Spears necesita renunciar a su papel como tutor. La medida es una gran victoria para la cantante quien dijo en audiencias dramáticas en junio y julio que su padre necesitaba estar fuera.
“La situación actual es insostenible”, dijo Penny después de escuchar los argumentos de ambas partes.
“Refleja un ambiente tóxico que requiere la suspensión de James Spears”, comentó.
James Spears solicitó la tutela en 2008 y ha sido su principal controlador y mayor defensor. En las últimas semanas cambió de postura, pidiendo a la jueza que terminara con ella.
Britney Spears y Rosengart estuvieron de acuerdo en que la tutela debería acabar y dijeron en documentos judiciales que la remoción de James Spears era un primer paso necesario.
Rosengart ha presionado agresivamente para la destitución de James Spears desde momentos después de que Penny le permitió a la cantante contratarlo como su abogado en julio.
Horas antes de la audiencia, una importante calle fuera de la corte se cerró al tránsito vehicular, permitiendo que 100 simpatizantes de Spears marcharan y realizaran una protesta en la que gritaban “¡La tutela debe terminar!” y otras consignas a favor de Britney. A medida que creció la protesta, los fans cantaron éxitos de Spears como “Toxic” y “Baby One More Time”, mientras que había oradores que describían como otras tutelas abusivas habían afectado a sus familias.
“Estamos haciendo historia ahora”, dijo Martino Odeh, de 27 años, quien viajó desde Phoenix para estar en la corte. “Y el hecho de que podamos cambiar la vida de una estrella pop, a la que le han robado sus derechos por 13 años, es una locura. Es monumental”.
“Esperamos que haya un gran cambio hoy”, agregó Odeh.
Britney Spears y Rosengart enfatizaron en documentos judiciales la importancia de remover al padre como tutor, calificándolo como un primer paso necesario hacia la libertad de la artista y para “poner fin a la pesadilla kafkiana que se le impuso”.
Rosengart dijo en otro documento esta semana que James Spears “cruzó límites inimaginables” al involucrarse en vigilancia ilegal a Britney Spears, incluyendo la comunicación con su abogado, como se reportó en “Controlling Britney Spears”, un documental de diario The New York Times y el canal FX, uno de dos documentales sobre el tema estrenados en la víspera de la audiencia.
La cantante se comprometió con su novio de años, Sam Asghari, este mes, lo que significa que se creará un acuerdo prenupcial en el que su padre no debería estar involucrado, señalan los documentos judiciales.
En 2019 James Spears dejó de ser tutor personal de su hija, con control sobre sus asuntos personales, manteniendo solo su papel como tutor de su patrimonio, con control sobre sus finanzas. Él y sus abogados han dicho que eso hace que muchas de las quejas de su hija sobre su control sobre su vida carezcan de sentido.
Jodi Montgomery, una profesional designada por la corte, ahora actúa como tutora personal de Britney Spears, y Rosengart dijo en documentos judiciales que Montgomery también accede a poner fin a la tutela siempre que se pueda hacer de manera segura y sin problemas.
James Spears ha dicho que sólo ha actuado en beneficio de su hija. Señaló en un expediente judicial que no conoce de un “solo profesional médico ni el informe de un solo investigador de sucesiones” que haya concluido que su presencia como tutor fuera dañina para su hija o que debiera ser reemplazado.
La tutela se estableció en 2008, cuando Britney Spears atravesaba una crisis mental que la prensa cubrió obsesivamente, con hordas de paparazzi acechándola por todas partes, y que la llevó a perder la tutela de sus hijos.