Debido a la saturación de agua y el reblandecimiento del terreno, el miércoles por la noche hubo un deslave en el cerro de Zacatenco, en el tramo de la alcaldía Gustavo A. Madero, sin que se reportaran personas lesionadas o daños materiales.
El deslizamiento de tierra provocó que se deprendieran rocas que se esparcieron sobre los primeros carriles de la entrada a la autopista México-Pachuca, por lo que la zona fue acordonada la madruga de ayer.
De acuerdo con los reportes de las autoridades, los alrededor de cinco metros cúbicos del material que cayó sobre a la vialidad, en la entrada al paradero de Indios Verdes, eran tierra y rocas.
Personal de la Secretaría de Obras y Servicios retiró los desechos para liberar esa vía, y reportó que no hubo personas lesionadas ni daños mayores.
Los trabajos de retiro se hicieron durante la madrugada y el material se colocó en la lateral de la avenida Insurgentes Norte.
El jueves por la mañana, con apoyo de maquinaria pesada de la alcaldía se realizó el retiro del material en su totalidad. De manera preventiva fue abanderada la vialidad por elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
El percance ocurrió en Insurgentes Norte, esquina con Acueducto de Guadalupe, colonia San Pedro Zacatenco, en Gustavo A. Madero.
El deslizamiento de tierra alertó a las autoridades, luego de lo ocurrido la semana pasada en el cerro del Chiquihuite del lado mexiquense, porque la intensas lluvias que se registraron en la capital han reblandecido la tierra.
Además, autoridades de Protección Civil de Gustavo A. Madero informaron que mantiene monitoreados los cerros ante la inestabilidad que se ha presentado por las lluvias.
Manifestaron que a principios de este mes ya hubo un deslizamiento de rocas en la colonia Chalma de Guadalupe, donde rocas y lodo se esparcieron sobre varias calles; no hubo pérdidas humanas, pero las viviendas quedaron anegadas.
Desde que se presentó el deslizamiento en la referida colonia se empezaron a monitorear los cerros y se reforzó la vigilancia, luego de que la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, reconociera que hay familias en riesgo que habitan en el lado capitalino del cerro del Chiquihuite.