Ciudad de México. Mediante una iniciativa de reforma a la Constitución Política de la Ciudad de México se propuso en el Congreso capitalino establecer la lactancia materna como un derecho de la niñez y de las madres, así como la corresponsabilidad de los sectores público, privado y social para garantizar su ejercicio y protección.
Al exponer al pleno la iniciativa, que tuvo la adhesión de los cinco grupos parlamentarios y una de las dos asociaciones que integran el legislativo, la diputada del PRD, Polimnia Romana Sierra, apeló además al respaldo de la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum Pardo, “quien ha hecho alianza con las mujeres, niñas y niños de esta ciudad”, al recordar que en la última legislatura de la extinta Asamblea Legislativa se aprobó una ley que ella misma promovió en la materia, pero nunca fue promulgada por el entonces titular del Ejecutivo, Miguel Ángel Mancera.
Advirtió además que la iniciativa tiene un “enemigo poderoso, el interés económico de las empresas productoras y distribuidores (de sucedáneos de leche materna), que por cierto son las mismas empresas trasnacionales que comparten métodos y cabilderos con las refresqueras”.
Explicó que una de las razones por las que el consumo de dichos sucedáneos es tan alto se debe a que las empresas que los producen “mantienen campañas agresivas y de desinformación argumentando que proporcionan los mismos beneficios que la leche materna, de este modo se aboga por el amamantamiento de los lactantes y para el caso de que esto no sea posible se realice de forma segura y con la mejor alternativa, lo que implica que no es que los sucedáneos de la leche materna no deban existir, sino que no deben promoverse y mucho menos que exista la superioridad en consumo.
Resaltó en su exposición que existe suficiente evidencia científica de que la leche materna humana es el alimento idóneo para los menores debido a que cuenta con propiedades inmunológicas y nutricionales que no se localizan en ninguno de los sustitutos de la leche materna.
Explicó que la iniciativa tiene el propósito de incidir en la solución del problema de la falta en la práctica de lactancia y la forma adecuada de hacerlo.
El proyecto introduce dentro del inciso relativo al derecho a la alimentación y a la nutrición, del artículo 9, un artículo 1 bis en el que se establece que “La lactancia materna es un derecho bidireccional, por un lado de la niñez ya que constituye el medio más idóneo para asegurarle una adecuada nutrición y favorecer su crecimiento y desarrollo físico, cognitivo y emocional, previniendo enfermedades; asimismo, un derecho de las madres a decidir sobre su propio cuerpo, la libre autodeterminación de su persona, a disponer de información completa y unas condiciones adecuadas que les permitan poner en práctica sus decisiones, además de que su ejercicio conlleva beneficios a su salud” y un 1 Ter relativo a las corresponsabilidades.
La reforma, agregó Sierra Bárcena, es acorde con la declaración del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas que el 22 de noviembre de 2016 señaló como un derecho humano para bebés y madres, que debe ser protegido, apoyado y promovido.