Ciudad de México. El gobierno de México suspendió cinco permisos a la gigante Trafigura para importar gasolinas y turbosinas, entre otros productos, reveló un documento de la Secretaría de Energía (Sener).
Según un informe publicado la noche del lunes, la dependencia suspendió a la firma suiza, una de las mayores comercializadoras de materias primas en el mundo, cuatro permisos que están “en proceso de revocación” y uno en “procedimiento de caducidad”.
La Secretaría de Energía (Sener) no explicó las razones por las cuáles tomó la medida contra Trafigura y no respondió a una solicitud de comentarios. Una portavoz de la empresa dijo a Reuters que la decisión no tenía una “base válida”.
“Trafigura cumple con las leyes y reglamentos aplicables en las jurisdicciones en las que opera, incluyendo México”, comentó.
Las suspensiones se dan en medio de un endurecimiento de las reglas contra empresas extranjeras y privadas en el sector energético y de una política abierta del gobierno para favorecer a las compañías estatales, Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Todos los permisos de Trafigura suspendidos habían sido otorgados a finales de 2018, poco antes de que asumiera el poder el presidente Andrés Manuel López Obrador, y tenían vigencia hasta el 2038, de acuerdo a la lista previa de la Sener.
Reuters había reportado en julio que el brazo comercial de la estatal mexicana Pemex había suspendido temporalmente nuevos negocios con Trafigura, que enfrenta un escrutinio global por presunta corrupción.
La Comisión Reguladora de Energía (CRE), el regulador del sector energético mexicano, ha cancelado más de cien permisos de comercialización de petrolíferos, gas y otros productos, entre ellos uno de la petrolera Shell y otro del grupo español Iberdrola, alegando falta de actividad durante un año.
El Servicio de Administración Tributaria (SAT), anunció a finales de julio la suspensión de 82 empresas del padrón de importadores, entre ellas filiales de la española Repsol, del operador ferroviario estadunidense Kansas City Southern (KCS) y del conglomerado local Grupo México, alegando que no cumplían con los requisitos para permanecer en él.