Ciudad de México. A cuatro años de distancia, los vecinos de las cuatro torres de Tlalpan 550 no han podido regresar a sus hogares, debido a que la reconstrucción de los 390 departamentos no registra avances, pese a la canalización de recursos públicos, obligándolos a continuar con el pago de hipotecas o créditos; así como de rentas.
Pese a que se anunció el cierre parcial de Calzada se Tlalpan, únicamente llegó la vecina Alicia Ríos Martínez, quien explicó que las tres empresas que han intervenido en la rehabilitación del inmueble, ubicado en la colonia Moderna, en Benito Juárez, no han concluido las obras, “obligándonos a seguir una hipoteca que tenemos con Fovissste, como en mi caso, y además renta, cuando nuestros ingresos se han visto deteriorados por la pandemia”.
Integrantes de la organización Damnificados Unidos realizan una marcha y avanzan sobre avenida Chapultepec, al cruce con la Glorieta de Insurgentes, con destino al Ángel de la Independencia, en el cuarto aniversario del sismo de 2017, el 19 de septiembre de 2021. Foto Pablo Ramos.
La aparición de “más vicios ocultos, como la falta de 100 pilotes que soporten la construcción, han impedido que se atiendan los daños que sufrió hace cuatro años con el sismo y nosotros no podamos ingresar a nuestros departamentos a recuperar nuestras cosas, viviendo en la zozobra”.
Las autoridades capitalinas, dijo, “no nos han dado apoyo para sortear los gastos que ha implicado pagar una renta, ni el Fovissste nos ha esperado hasta que regresemos a vivir ahí, pues su argumento es que el edificio está en pie y debemos pagar, a lo que se suma el miedo a que los trabajos que se realizan no lo dejen bien y corramos riesgos futuros ante un nuevo sismo”.
Los integrantes de la Coordinación Damnificados 19S denunciaron también que tampoco han podido regresar a sus casas e incluso enfrentan todavía un camino lleno de incertidumbres, que amenaza no concluir en dos años más, según las proyecciones, por lo que “muchos regresaremos quizá a nuestras casas en cinco o seis años después del sismo, porque la reconstrucción está avanzando muy lentamente y está llena de obstáculos burocráticos e incumplimientos constantes”.
Señalaron que, incluso es la fecha en que aún no pueden concluir o actuar según los estudios de suelo en algunas zonas, es decir, lo más básico para determinar lo que procede, por lo exigieron sea más eficiente el trabajo de la Comisión para la Reconstrucción y de las diferentes instancias de gobierno involucradas, para dejar de acumular incumplimientos y retrasos en los estudios, demoliciones, obras civiles, obras de rehabilitación y de reconstrucción.
Foto Pablo Ramos
Además de que se concluyan a la brevedad los pendientes de las obras entregadas y las que están por entregarse; se agilice y se concluya de una vez el diagnóstico de suelos en Tláhuac e Iztapalapa para determinar la reubicación, la rehabilitación o reconstrucción que proceda, y se cumplan las rutas y garantías dadas a los predios en reconstrucción, con plazos definidos y con garantías sobre la idoneidad de las empresas propuestas, la correcta supervisión de los proyectos y obras, y la ministración de los recursos necesarios para culminarlas.
El blindar el proceso de reconstrucción y el fideicomiso para que culmine de manera exitosa; y se revise, de manera conjunta entre Gobierno, Congreso y damnificados, los tabuladores establecidos, pues han sido ya rebasados simplemente por la inflación y los costos reales, son otras de sus demandas.
Mientras, en Bolívar 168, colonia Obrera, donde murieron 32 personas en una fábrica de costura, integrantes de la organización Damnificados Unidos realizaron una misa y guardaron un minuto de silencio en memoria de quienes perdieron la vida, resultaron lesionados y perdieron su hogar.
Con cartulinas donde se leía: “La emergencia no ha terminado”, “Claudia haz cumplido ya cuatro años de damnificados”, “Exigimos reconstrucción integral”, “Atención a daños por grietas”, “Insurgentes 476 presente” y “Ni un paso atrás” exigieron a las autoridades concluir el programa de reconstrucción de los inmuebles que resultaron dañados hace cuatro años.