Un ambiente de violencia, donde ser mujer implica un riesgo mayor, es el eje de la cinta Noche de fuego, la cual “ tiene mucha verdad y un corazón enorme”, pues aborda desde los ojos de una niña, los peligros que se afrontan en un territorio controlado por el narco.
Así lo consideró Nicolás Celis, productor de la cinta, dirigida por Tatiana Huezo, la cual tuvo su estreno la noche del pasado martes en el Complejo Cultural Los Pinos, donde asistieron como invitados Yalitza Aparicio y Danny Glover, quien es uno de los coproductores del largometraje que se proyecta ya en salas comerciales.
Filmada en la sierra Gorda de Querétaro e Hidalgo, la cinta recrea lo que significa crecer en un ambiente peligroso, pero con la mirada luminosa y solidaria de tres niñas, que son grandes amigas. Es una historia mexicana, pero la temática es universal.
Celis dijo a La Jornada: “Siempre busco hacer películas que me conecten, que me parezcan importantes; esos son los motores para decidir adentrarme en una aventura. En este sentido, Noche de fuego tiene una combinación perfecta, porque es para toda la familia, pero sí tiene un contexto difícil, aunque no se observa de una forma tan dura”.
La ventaja, prosiguió, “es que Tatiana –en su primera película de ficción– es sumamente sutil y accesible, pero le exige al espectador que aporte de su vivencia para completar los espacios en blanco”.
En realidad, explicó el productor, “busco acompañar a los directores con sus expectativas, porque siento que ninguna cinta tiene el dinero suficiente para lo que uno quiere; pero sí tener las mejores concesiones creativas, porque cuando trabajo con un realizador confío de manera plena y con Tatiana llevo más de 11 años”, pues también ha producido los documentales El lugar más pequeño y Tempestad.
Huezo –enfatizó Celis– “trabaja con emociones, con verdad y con cosas que buscamos muchos al ver una cinta, como querer conectar e identificarnos y sentir esa empatia que hace falta”.
Sobre la trama basada en la novela Prayers for the stolen (Ladydi en español) de Jennifer Clement,
Nicolás Celis explicó: “México es un país muy rico, tiene aspectos oscuros y otros muy luminosos, pero con el arte uno refleja las cosas más urgentes y visibles. En este caso, se observa lo que es crecer en un lugar, donde ser mujer es un riesgo aún mayor; donde las madres esconden a sus hijas en un agujero para que no se las lleven, les cortan el cabello, es decir, las masculinizan” para que no desaparezcan.
De hecho, “no pusimos el foco en qué sucede cuando se las llevan, sino en mostrar cómo es crecer en un lugar donde los hombres se han ido y, en muchos de los casos, las madres solteras crían a las hijas o hijos, lo cual es algo que nos permite conectar”.
En el pasado Festival de Cannes, Noche de fuego, “levantó muchos aplausos, no porque se mida con ellos, sino que realmente se agradeció que no fuera una película que explotara y enalteciera la violencia, pero sí tiene mucha verdad y un corazón enorme”, puntualizó Nicolás Celis quien destacó que la cinta tendrá “un viaje espectacular”, pues estará disponible en plataformas, así como en los festivales de San Sebastián, Nueva York, Londres, Zúrich y Guanajuato.
Yalitza Aparicio, al presentar la cinta, explicó que Tatiana Huezo cuenta historias “con un corazón tan grande porque visibiliza temas esenciales para la sociedad; éstas son importantes a fin de que todos abramos los ojos y digamos: ¡ya no se pueden repetir este tipo de cosas! No debemos vivir así. Todos formamos parte de la sociedad; nuestros actos tienen mucho que ver con lo que se refleja y lo que somos. Nuestra forma de accionar hoy, puede cambiar el futuro”.
Sin duda, agregó la actriz, “darnos la mano nos lleva a un mejor futuro, pero lo vamos a lograr si estamos unidos y luchamos por la misma causa y, para todas las víctimas, si no nos quedamos calladas”.