San Sebastián. La actriz francesa Marion Cotillard, distinguida este viernes con el premio honorífico Donostia del Festival de cine San Sebastián, dijo que aún ahora no sabe si está a la altura de un papel.
En una conferencia de prensa en la jornada inaugural del certamen de la ciudad española (norte), Cotillard habló de la presión que siente al trabajar.
"Es algo que ha sido siempre parte de mi vida. Siempre que empiezo una película no sé si estaré a la altura", explicó la actriz francesa de 45 años, ganadora del Óscar por por su interpretación de Édith Piaf en "La vida en rosa".
Cotillard ha brillado en la pantalla con muy diversos roles en películas dirigidas por directores como Woody Allen, Christopher Nolan, Steven Soderbergh o Michael Mann.
Preguntada por sus actrices favoritas, Cotillard citó a Greta Garbo.
"Cuando era pequeña era una gran admiradora de Greta Garbo, porque era la actriz favorita de mi madre", explicó. "Siempre me sentí conmovida por esas personas que ostentan un equilibrio entre lo femenino y lo masculino", justificó.
El Óscar por su papel de Piaf le abrió las puertas del cine estadounidense, estimó Cotillard, que tuvo palabras de elogio para la industria cinematográfica francesa.
"Francia es un país de cine, de hecho fue ahí donde se creó, está en el ADN cultural del país", estimó.
"Hay algo en la cultura que la hace necesaria, y que celebra la vida, que la cuestiona, que cuestiona el mundo. Y cuestionar es también parte del espíritu francés".
El Festival de San Sebastián, que se celebra hasta el 25 de septiembre en la localidad vasca, justificó su galardón Donostia a Cotillard porque "ha brillado con intensidad en producciones europeas y estadounidenses que la han llevado a desempeñar con igual talento roles dramáticos, cómicos y de acción".
El otro actor que recibirá el premio Donostia en esta edición es el estadounidense Johnny Depp, pero en este caso el anuncio provocó polémica por las acusaciones de violencia conyugal de que fue objeto por su antigua esposa Amber Heard.