El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) informó que se descubrió una escalinata original y una ofrenda con dos figurillas masculinas en la zona arqueológica de Xochitécatl, en Tlaxcala, durante los trabajos de conservación en la llamada pirámide circular, en el poniente de ese sitio.
Además de encontrar los peldaños, desplantes y alfardas de la escalinata original de este monumento, también hallaron una relevante ofrenda asociada al mismo.
La arqueóloga coordinadora del proyecto de investigación, Laura Ledesma Gallegos, explicó que estudios previos definían a Xochitécatl “como un enclave de vocación femenina, siendo un opuesto a uno masculino, caso de Cacaxtla. Ahora los vestigios arqueológicos indican la presencia de una sociedad y un gobierno más paritario, al menos, hacia el momento de la colocación de dicha ofrenda en el periodo epiclásico (700-900 dC)”.
La ofrenda encontrada consiste en siete elementos, dos de los cuales son figurillas masculinas de 25 centímetros de alto que acompañan a un par de braseros. Cada pieza porta un maxtlatl (taparrabo) pintado de rojo, elaborados tocados, bastones de mando y un rollo de arcilla en la mano, el cual podría representar papel amate.
“Toda la ofrenda es epiclásica, salvo una figurilla del periodo preclásico (2500 aC-200 dC). Nos puede hablar de la reiteración de un linaje, posiblemente, de sacerdotes o algún tipo de jerarca del asentamiento”, continuó la especialista.
Cultura totonaca
En un comunicado, el INAH destaca que el resto de las piezas de la ofrenda corresponde a dos vasijas del tipo Silueta Compuesta, las cuales han sido registradas y resguardadas junto con las figurillas masculinas, con la probabilidad de que puedan incorporarse a la colección del próximo museo de sitio.
Sobre los detalles de la ofrenda, la arqueóloga Ledesma señaló que se localizó en el costado poniente del edificio circular, coincidiendo en su colocación y en su estilo con la temporalidad epiclásica de la escalinata descubierta, además de que evidencia rasgos de la tradición totonaca del Golfo de México.
Exploraciones realizadas hace dos décadas por Mari Carmen Serra Puche han confirmado que en Xochitécatl se produjo un salto ocupacional entre los periodos preclásico y epiclásico, dada la ausencia de elementos del clásico; una probabilidad es que la ofrenda que ahora se encontró marque el inicio del segundo momento de ocupación en el sitio.
Los datos arrojados por la exploración, agrega Ledesma Gallegos, “denotan incluso un recubrimiento negro, que debió ser parte de los acabados originales del monumento”.
Actualmente, en el campamento asignado a este proyecto se realizan microexcavaciones sobre las vasijas para conocer si su contenido corresponde a cenizas o a otro material, y si éstas pudieran pertenecer a los individuos representados en las figurillas.
También se continúa con los trabajos en el norte del monumento circular, donde fue localizada la escalinata original, la cual será consolidada en sus elementos compositivos bajo una propuesta que permita reintegrar sus peldaños y sea posible el ascenso hasta la cima de la estructura de 11 metros de altura, sustituyendo así la actual escalinata de metal, ajena a su contexto original.
“Esperamos que estos trabajos nos ayuden a la difusión del sitio arqueológico, y que enriquezcan el discurso y la visita del próximo museo de sitio de Xochitécatl, de modo que se despierte el interés de la sociedad hacia este legado histórico”, concluyó la arqueóloga Ledesma Gallegos.