Con 57 años de servicio, fundador de la Telesecundaria en México y de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), el profesor José González Figueroa denunció que la Secretaría de Educación Pública (SEP) determinó su cese como profesor de secundaria “por supuestamente haber faltados tres días más uno a mis deberes como maestro, cuando llevo casi seis décadas como docente frente a grupo y nunca abandoné mis responsabilidades”.
En entrevista con La Jornada, señaló que un juez federal “determinó que no participé en la lucha contra la mal llamada reforma educativa de Enrique Peña Nieto, cuando formé parte activa de las movilizaciones, sin que ello afectara a mis alumnos.
Tras conocer la sentencia, este lunes, “a la brevedad interpondré un amparo, porque no soy un delincuente, sino un maestro con toda una vida de lucha, egresado de la Normal de Maestros para educación primaria, y después de la Normal Superior, donde me especialicé como docente de historia para nivel secundaria”, destacó.
Con esta sentencia, dijo, “se pretende borrar una trayectoria de 57 años, cuando la propia SEP había accedido a reinstalarme, pero suspendió el proceso de forma unilateral, cuando incluso se me había notificado la escuela a la que me asignarían, pues era uno de los más de 900 profesores cesados por combatir la mal llamada reforma educativa, de los cuales 30 seguimos a la espera de recuperar nuestra plaza”.
Tras calificar como una “injusticia y un atropello, que violenta el compromiso del presidente Andrés Manuel López Obrador, de reinstalar a todo maestro afectado por la reforma educativa peñista”, Figueroa González destacó que no es la primera vez que enfrenta la “cerrazón de la burocracia de la SEP, pues ya han intentado cesarme o retener mi salario en al menos tres ocasiones”.
El primer intento, dijo, “fue por rechazar la tarjetización bancaria en el pago del salario a los docentes; la segunda, por defender un terreno, que sirve como espacio deportivo a la telesecundaria donde laboro, y por oponerme a que se cerrara el turno vespertino de la secundaria 301, donde hasta hace cuatro años me desempeñaba como maestros de historia”.