El primer proyecto de la industria cinematográfica rusa dirigido a una audiencia internacional es el Festival de Cine Ruso, que este año se celebrará por segunda vez en México. Lanzado en nueve países durante su primera edición en 2020, tuvo más de 200 mil espectadores. En esta edición ofrecerá ocho títulos de géneros diversos entre los que se encuentran producciones recientes.
Organizado por Roskino, instancia del Estado ruso que representa a su industria cinematográfica en los mercados internacionales. “Estamos felices de traer el Festival de Cine Ruso de regreso a México. El año pasado recibió muchas críticas entusiastas del público y de los medios de comunicación, por lo que no hubo duda de que volvería”, afirmó Evgenia Markova, directora ejecutiva de ese organismo.
Las películas estarán disponibles en línea de manera gratuita, a través de FilminLatino del Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine). “Las plataformas VOD han fortalecido su estatus como principales proveedoras de contenido y creadoras de tendencias. Esperamos que el nuevo programa del festival, con géneros y programas más diversos, atraiga aún más espectadores”, apuntó Markova.
Estilos diversos
Fernanda Río, directora de Promoción del Cine Mexicano de Imcine, celebró la colaboración entre el Festival de Cine Ruso y FilminLatino por permitir a la audiencia mexicana acceder a diferentes narrativas. “Pensando en nuestro público, la plataforma también abre sus puertas a propuestas de otros países que nos permitan conocer y abrazar culturas y estilos cinematográficos diversos, tan diversos como nuestro cine. Gracias a esta alianza con Roskino, los mexicanos podrán disfrutar por segunda vez de lo mejor del cine ruso”, destacó.
La segunda edición del encuentro también buscará satisfacer las preferencias del público mexicano observadas el año pasado. “Hemos incluido muchos dramas y una dramaturgia en el programa. El Festival de Cine Ruso también es una oportunidad para presentar talentos al público y a los representantes de la industria cinematográfica mexicana. Nos permitirá estrechar los lazos entre la industria de las dos naciones e iniciar nuevos proyectos”, sostuvo Markova.
“El contenido audiovisual es lo que está moviéndose en el mundo. Parece que ahora es el idioma más simple; está es la razón por la que el cine es el medio más apropiado para crear puentes entre los países”, puntualizó la funcionaria rusa.
Entre las películas que podrán verse este año está el drama Díselo a ella, de Alexander Molochnikov, cinta en que se narra las dificultades a las que se enfrenta un niño obligado a tomar decisiones tras el divorcio de sus padres. En Sheena 667, de Grigory Dobrygin, se explora el tema del amor virtual y sus amenazas a las relaciones. También estará disponible el filme Masha, de Anastasiya Palchikova, que hace un retrato de la caótica Rusia de los años 90.
El documental Stanislavski, sed de vida será estrenado en el festival. Está dedicado al genio del teatro del siglo XX, Konstantin Stanislavsky, autor del mundialmente famoso sistema de Stanislavski, teoría de las artes escénicas que influyó ampliamente en el teatro y el cine modernos.
El Festival de Cine Ruso se llevará a cabo del 23 de septiembre al 17 de octubre en FilminLatino. Otros países que este año recibieron al encuentro fueron Argentina, Chile, Uruguay, Kazajstán y Corea del Sur.