La compañía zapatista aerotransportada, llamada La Extemporánea, con 177 integrantes, salió de la Ciudad de México ayer, con destino a Viena, Austria, con escala en Madrid. No fue sencillo vencer el racismo estructural en torno a la posibilidad de que cualquier persona en el país obtenga un pasaporte. Fue necesaria la denuncia y exhibición pública del discurso y descalificaciones de empleados públicos encargados de las oficinas de trámite de pasaportes, los cuales tenían tras de sí el “respaldo “de la cadena originada desde el registro de nacimiento de los solicitantes zapatistas, a la cual por cierto no es ajena gran cantidad de mexicanos que no representan el ideal urbano y clasista detrás de los requisitos de acreditación. Se constituyeron así en personas bajo sospecha. ¿Por qué y para qué pretendían un pasaporte? Juicios culturales plagados de ofensas. Por fortuna, con la denuncia se logró una intervención oficial de funcionarios, tanto en Relaciones Exteriores como en Gobernación, para ir superando obstáculos. Si a ello sumamos el contexto de pandemia, el acceso a vacunas potenciados en requisitos de ingreso a países europeos, podemos imaginar el desafío a la voluntad que implicó concretar esta fase de la Travesía por la Vida. Ciertamente los numerosos colectivos europeos en paralelo al acompañamiento al escuadrón marítimo 421, que regresó al país el pasado sábado, han realizado gestiones de respaldo para las medidas que en su caso deban cubrirse al arribar a Viena.
El EZLN informó que La Extemporánea, nombrada así por el calificativo recurrente que recibieron por sus registros de nacimiento, “está organizada en 28 equipos de Escucha y Palabra, formados por cuatro-cinco compas cada uno; uno de juego y travesura y uno coordinador, por lo que podrá cubrir 28 rincones de la geografía europea en forma simultánea. [...] Días después se incorporará la delegación del Congreso Nacional Indígena-Concejo Indígena de Gobierno y el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua”.
Como evidencia de la congruencia proverbial que les caracteriza, los zapatistas promovieron “por qué sí a la consulta y sí a la pregunta”. Con ello iniciaron la Campaña Nacional por la Verdad y la Justicia. Y hoy dedican este esfuerzo de la travesía “a todas las desaparecidas, a las familias que sufren su ausencia y, sobre todo, a las mujeres y hombres que luchan por encontrarlas y conseguir la verdad y justicia que todos necesitamos y merecemos. Justamente han traído consigo desde Chiapas las actas de las asambleas de las comunidades zapatistas, no zapatistas y antizapatistas, con sus acuerdos sobre el apoyo a la lucha por verdad y justicia para las víctimas de la violencia, según la consulta realizada el pasado 1º de agosto.
Por otra parte, ante la cacería de migrantes que en los últimos días se ha producido en Chiapas, el pasado 4 septiembre los subcomandantes Moisés y Galeano difundieron un enérgico llamado denominado “Contra la xenofobia y el racismo, la lucha por la vida”. Desmontaron los argumentos oficiales para mostrar el trasfondo de esta política, pues tiene ese rango, vinculada a los acuerdos con el gobierno estadunidense. Es inaceptable señalar que sólo dos agentes de migración golpearon a migrantes y fueron suspendidos. Las imágenes de la persecución a las caravanas, por elementos de la Guardia Nacional y empleados del Instituto Nacional de Migración están en lo que una vez se llamaron benditas redes sociales. Como muestra de su solidaridad, que nos evoca aquella que organizaron en favor de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación en Chiapas en los días de intensa movilización, ahora informaron que tanto las 12 juntas de Buen Gobierno como la Comisión Sexta, reunieron una cantidad “de paga” para hacerla llegar a los albergues y organizaciones de trabajo humanitario con migrantes en Chiapas.
En Europa se están encontrando también el estigma y persecución a migrantes, la lucha contra megaproyectos y tantas realidades de luchas que ahora se articulan para recibir dignamente a los zapatistas que van a escucharles y a aprender. Objetivamente están acercándose al concepto central de que el capitalismo no se da en un solo país.
Falta conocer a detalle el balance de la actividad intensa que desplegó el comando marítimo Escuadrón 421, que navegó en el mar durante siete semanas en la ruta inversa a quienes se dijo llegaron a conquistarnos y hoy se responde no nos conquistaron, así lo afirmaron en el inicio del año 501 de la resistencia y en el arduo despliegue en las tierras de la Europa insumisa durante tres meses.
Las muestras de racismo estructural aquí enunciadas, incluida la persecución de migrantes, en especial los haitianos fácilmente perseguibles por su color de piel, son sólo un ejemplo ante el que está naturalizado en la sociedad mayoritaria. Toda una tarea para integrarlo con la lucha anticapitalista sin reduccionismos.