Construir un nuevo museo para las momias de Guanajuato es innecesario y, por tanto, injustificado, sostuvo su ex directora Paloma Robles Lacayo, quien en nombre de la sociedad civil de la capital de esa entidad reiteró el rechazo a que el gobierno de ese municipio, de origen panista, contraiga una deuda pública por cerca de 70 millones de pesos para realizar ese proyecto.
“Vamos a detener esta intención; vamos a promover amparos y a continuar con nuestras movilizaciones”, afirmó la gestora cultural y activista a La Jornada en vísperas de que el Congreso de ese estado vote el dictamen en su sesión de este lunes.
“Nos queda claro que (ese proyecto) no obedece en la racionalidad, la argumentación ni la lógica. Obedece a razones que no son confesables y que no se pueden explicar, porque son ilegales. Frente a este atropello nos queda defendernos igual, con la ley”, explicó.
“Nos estamos organizando para presentar los amparos que sean necesarios ante la serie de irregularidades. Incluso, el lugar donde pretenden construir el edificio –la ex estación del tren– hoy es un centro deportivo. Por eso hablamos también de un impacto social y ambiental en la zona.”
Uno de los principales argumentos para oponerse a la construcción del nuevo recinto y al traslado de esa reconocida colección, la más grande de momias naturales contemporáneas del mundo, es que los móviles son mercantiles, ya que el museo contará con un área comercial de 53 locales.
“Nuevamente, se está ejerciendo la misma lógica de esta administración municipal de llevar a las momias en calidad de edecanes de lujo para garantizar afluencia a negocios privados. Lo señalo así porque, al menos de lo que sabemos, han ocurrido al momento ocho exposiciones itinerantes de las momias de Guanajuato en contextos dedicados a la diversión, el entretenimiento y el espectáculo.”
Una de los más recientes fue en la pasada Feria de León, donde en el módulo habilitado para la exposición de las momias se encontraba un código QR que, al escanearlo, permitía obtener descuentos en hoteles, restaurantes, bares y cantinas de Guanajuato capital. Antes, se les ha llevado a un pasaje comercial conocido como La Subterránea, donde hay baile, venta de comida y catas de bebidas alcohólicas, mencionó.
Un elefante blanco
Para la sociedad guanajuatense queda claro que esa iniciativa es un negocio y que se quiere endeudar a la ciudadanía para construir una plaza comercial con momias. De llegar a realizarse, el área de exhibición sería de 24.6 por ciento de la construcción; es decir, ni siquiera la cuarta parte, subrayó.
La ingeniera bioquímica, con maestría en artes, calificó de infundado el argumento de las autoridades municipales de que el actual museo “está completamente rebasado”, porque supuestamente los fines de semana y periodos vacacionales se han observado filas de 7 mil personas.
Argumentó que en 2019, antes de la pandemia, sólo un día registró una afluencia de 6 mil 841 visitantes y que la carga turística de ese recinto –que es de 3 mil 240 personas de lunes a jueves, y 3 mil 420 personas de viernes a domingo– se rebasó sólo en 39 días, lo que representa 10.6 por ciento del año.
“Se habla de que la capacidad turística del nuevo edificio sería de 15 mil personas por día, lo que significa que 96 por ciento de los días del año estaría subutilizado a menos de 30 por ciento. Están pensando en construir un elefante blanco.”
Paloma Robles aseguró que el proyecto del nuevo museo viola recomendaciones internacionales de manejo de restos humanos en ámbitos museísticos, la legislación en torno al control sanitario de cadáveres y principios dictados por la Comisión Nacional de Bioética, en tanto que “utilizar los cuerpos para incrementar la hacienda pública municipal” no es ético.
Asimismo, pone en riesgo la posibilidad de que los elementos de esa colección alcancen la categoría de Monumentos Históricos Muebles –inherente a la adscripción de las momias al inmueble histórico del que proceden y junto al que pertenecen: el panteón municipal de Santa Paula, del siglo XIX– según la Ley Federal sobre Zonas y Monumentos Arqueológicos, Artísticos e Históricos, asentó.
Indicó que existe un proceso judicial orientado al reconocimiento de las momias de Guanajuato como monumentos históricos muebles –como ha sucedido para 40 momias de Zacatecas y Ciudad de México–, por el Centro INAH Guanajuato, demandado ante un juzgado de distrito el 15 de julio de 2021.