Copenhague. El director de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para Europa, Hans Kluge, se mostró ayer pesimista sobre que un alto índice de vacunación vaya a detener por sí solo la pandemia de Covid-19 debido a que las variantes del nuevo virus han reducido la perspectiva de una inmunidad colectiva.
La probabilidad de que la enfermedad siga siendo endémica es cada vez mayor, por eso Kluge exhortó en rueda de prensa a “prever para adaptar nuestras estrategias de vacunación”, sobre todo en lo relativo a las dosis adicionales.
En mayo, el especialista dijo que “la pandemia terminará cuando hayamos alcanzado una cobertura mínima de vacunación de 70 por ciento” de la población mundial. A la pregunta de si mantenía lo dicho, respondió que las nuevas variantes más contagiosas, principalmente delta, han cambiado la situación de las predicciones.
Antes, aunque esta variante inicialmente detectada en India ya existía, “no había semejante emergencia de variantes más transmisibles y más virales”, explicó. Recalcó que “esto nos lleva al punto de que el objetivo esencial de la vacunación es sobre todo evitar las formas graves de la enfermedad y la mortalidad”.
“Si consideramos que el Covid seguirá mutando y continuará entre nosotros, como la gripe, entonces debemos prever cómo adaptar progresivamente nuestra estrategia de vacunación ante la transmisión endémica, y adquirir conocimientos muy valiosos sobre el impacto de las dosis adicionales”, agregó.
Según los epidemiólogos, parece poco realista alcanzar la inmunidad colectiva sólo con las vacunas, pero éstas son vitales para frenar la pandemia. En Dinamarca se levantaron desde ayer las últimas restricciones gracias a su alto porcentaje de población vacunada: 73 por ciento de sus 5.8 millones de habitantes.
Antígeno de Moderna, más eficaz que el de Pfizer y J&J
Tres estudios estadunidenses publicados por el Centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) sugieren que las vacunas ofrecen una fuerte protección contra la hospitalización y la muerte ante Covid-19, incluso frente a la variante delta, pero su efecto parece disminuir entre las poblaciones de mayor edad, especialmente de los 75 años en adelante.
Los datos sobre hospitalización de nueve estados de Estados Unidos durante el periodo en que delta era dominante también sugieren que la vacuna de Moderna es más eficaz para prevenir las hospitalizaciones entre individuos de todas las edades que las de Pfizer o Johnson & Johnson.
En ese estudio de más de 32 mil visitas a sanatorios, la vacuna de Moderna tuvo una eficacia de 95 por ciento para prevenir las hospitalizaciones, en comparación con 80 por ciento de Pfizer y 60 de Johnson & Johnson.
Los CDC informaron que podrían autorizar la vacuna de Pfizer para niños de cinco a 11 años en Estados Unidos, en momentos en que los republicanos buscan demandar al gobierno de Joe Biden ante el anuncio de que la inoculación será obligatoria para dos tercios de los trabajadores federales y del sector privado. Sólo 25 por ciento está reticente a vacunarse.
Los refuerzos para extender la protección de las vacunas podrían resultar innecesarios para muchas personas, afirmó Sarah Gilbert, una de las principales científicas en el desarrollo del biológico de AstraZeneca.
Gilbert declaró al diario The Telegraph que la inmunidad de la vacuna sigue siendo alta incluso contra delta. Si bien las personas de edad avanzada y aquellas con sistemas inmunes debilitados podrían requerir de refuerzos, el régimen estándar de dos aplicaciones brinda una protección a largo plazo para la mayoría de las personas, aseguró.
Cuba compartió los resultados del avance de sus inmunizantes de la línea Soberana con expertos de la Universidad de Harvard y representantes de la comunidad científica internacional, informó el diario Cubadebate.
El director del Instituto Finlay de Vacunas, Vicente Vérez, destacó en la sesión remota la importancia del trabajo conjunto entre esa entidad y otras de la nación caribeña como el Centro de Inmunología Molecular, el de Biopreparados y la Universidad de La Habana, imprescindibles en el desarrollo de los productos.
En Francia, la justicia acusó a la ex ministra de Salud Agnès Buzyn de “poner en peligro la vida de otras personas”, en la primera inculpación de un responsable político por la gestión de la crisis sanitaria.
La pandemia ha dejado en el mundo 223 millones 610 mil 652 casos confirmados y 4 millones 612 mil 196 fallecidos, según un recuento de la Universidad Johns Hopkins.