Chilpancingo, Gro., El Comité por la Libertad de los Presos Políticos de Guerrero informó que obtuvieron la libertad Elías Valdovinos Díaz, Abraham Delgado Delgado y Antonio Magaña Martínez, todos militantes de la Organización Campesina de la Sierra del Sur (OCSS), que estaban recluidos en el penal de Acapulco desde hace casi 14 años, acusados de homicidio.

El ex preso político Gonzalo Molina González manifestó que el comité demanda la libertad de al menos 42 reclusos en penales de Sonora, Chiapas, Morelos y el Altiplano, en el estado de México. A la fecha se trabaja en los casos de siete tlapanecos acusados de secuestro, que fueron sentenciados sin que tuvieran intérpretes durante las audiencias.

Éste y otros casos se plantearon en la mesa de diálogo con el gobernador Héctor Astudillo Flores y el presidente del Tribunal Superior de Justicia, Alberto López Celis, a partir del Protocolo de Estambul, detalló el también promotor de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía Comunitaria de la Casa de Justicia El Paraíso, municipio de Ayutla, en la Costa Chica del estado.

Admitió que algunos presos que deben quedar libres militaron en el Ejército Popular Revolucionario y el Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente. “Estamos en la defensa real de los presos políticos porque muchos que se decían defensores de los compañeros, los abandonaron, los traicionaron”.

También se trabaja en el caso de miembros de la Organización de Campesinos Ecologistas de Coyuca de Catalán, en este caso Gerardo, Rodolfo y Palemón Cabrera, con casi 20 años presos, acusados se secuestro y asesinato, al igual que Martín Cruz Avellaneda, con 21 años en la cárcel. En la misma situación está Gerónimo Hernández, que ya cumple 21 años encarcelado imputado por homicidio, cuyos defensores abandonaron los casos.

Molina González aseguró que otro caso pendiente es el de los hermanos mixtecos Florentino y Germán Morales Lucas (18 y 13 años presos), acusados de homicidio.

Denunció que durante las gestiones por la libertad de los presos políticos “ha habido amenazas del crimen organizado, no sólo contra mi persona, sino también hacia compañeros que nada tienen que ver, como el caso de la Casa de Justicia de El Fortín, ubicada en Tixtla”.

Molina González, quien salió de la cárcel el 29 de febrero de 2019, ratificó que seguirá trabajando de promotor indígena de los pueblos de la Montaña y Centro de Guerrero.