Santiago. La Fiscalía Nacional de Chile, en su informe anual acerca de tendencias del narcotráfico en el país, alertó sobre recientes intentos de asentarse aquí por parte de carteles internacionales de droga, específicamente los mexicanos de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, y el colombiano Clan del Golfo.
"Enfrentamos por primera vez la amenaza de instalación de carteles internacionales, fenómeno que no conocíamos. Tenemos que admitir que hemos iniciado la senda de aquellos territorios que albergan producciones locales de sustancias ilícitas y la instalación de carteles dentro de sus fronteras. A esto debemos ponerle freno ahora, no podemos permitir que siga profundizándose, que estas agrupaciones echen raíces", advirtió el Fiscal Nacional, Jorge Abbott.
Específicamente, dijo que se neutralizaron seis intentos de ingreso de seis mil 200 kilogramos de marihuana por el Puerto de San Antonio, 100 kilómetros al oeste de Santiago. Este terminal portuario recibe 1,7 millones de contenedores anualmente, imposibles de fiscalizar en su totalidad.
A su turno, el Cartel de Jalisco Nueva Generación intentó "instalar infraestructura para la producción a gran escala de marihuana de alta concentración en la comuna de Alto Hospicio, en la Región de Tarapacá", al norte del país.
En cuanto al Clan del Golfo colombiano, dijo que "posee una presencia permanente a través del envío de marihuana".
Luis Toledo, director de la Unidad Especializada en Tráfico Ilícito de Estupefacientes de la Fiscalía Nacional, afirmó que además de instalarse en el país, buscan utilizarlo como plataforma de exportación. Al respecto, mencionó que recientemente hubo un "intento fallido de traficar 665 kilos desde Chile a Holanda" por parte del Cartel de Sinaloa.
Consideró que el narcotráfico desde Colombia a Chile, tanto marítimo como terrestre, se encuentra consolidado. Se origina en el Valle del Cauca en áreas dominadas por el Cartel del Golfo y consiste en " marihuana cripy y la venden en los sectores de más bajos ingresos”.
Describió la situación como "de naturaleza comercial” aprovechando la permeabilidad de las fronteras y la costa de más de cuatro mil kilómetros de longitud con decenas de puertos de norte a sur, algunos de los cuales "se encuentran afectados por el interés de los criminales por traer droga y también de llevarla desde aquí a otros continentes”.
“Chile es también un destino y hay que decirlo con claridad. Hasta el momento siempre habíamos señalado que era un país de paso y poca de esa droga quedaba aquí, pero eso no es así. La droga llega para consumo del mercado nacional”, aseguró.
Toledo enfatizó lo significativo de que cárteles mexicanos se esmeren en traer toneladas de marihuana hasta acá, a una distancia superior a los seis mil kilómetros, algo hasta hace poco inaudito.
"Estamos hablando de marihuana mexicana en Chile, eso no es común, hasta ahora era solo colombiana”.
Según cifras del Servicio Nacional de Drogas y Estupefacientes (Senda), el 30,6 por ciento de los jóvenes en edad escolar, dice haberla consumido en el último año.