Horas antes de que la sala superior de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) aprobara el proyecto contra la criminalización del aborto, el presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró que en su caso alentaba la resolución en ese poder.
“He actuado con prudencia, de manera respetuosa, porque son temas muy controvertidos, polémicos, y no queremos avivar ninguna confrontación”, destacó. Y puso sobre la mesa la razón de su postura: no puede exponerse a un desgaste desde el ámbito de la investidura presidencial.
Sobre el tema, opinó que “lo deben resolver las mujeres, el pueblo; en este caso sí lo está atendiendo la Suprema Corte; debemos esperar su resolución, porque es el poder que tiene la facultad para decidir sobre estos asuntos. En mi caso, como Presidente, he actuado con prudencia, de manera respetuosa, porque son temas muy controvertidos, polémicos, y no queremos alentar ninguna confrontación.”
Por la investidura presidencial
El mandatario insistió en dejar hacer a la Suprema Corte: “que ahí se resuelva, si ya lo están tratando, pero no tomar partido; en mi caso, no creo que sea lo más prudente. Vamos a esperar a ver qué decide la Corte. Deben entenderse las cosas.
“Yo no puedo, por la investidura presidencial, exponerme a un desgaste, por lo que tengo que cuidarme, y este asunto es bastante polémico. Entonces, si ya lo tiene la Suprema Corte, a ellos les corresponde, no es un asunto del Ejecutivo.”