Nueva York., El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, visitó ayer las zonas golpeadas por inundaciones en Nueva York y Nueva Jersey, días después de inspeccionar los daños por el huracán Ida en Luisiana, azotes que el mandatario atribuye al cambio climático. Más de 400 mil hogares y negocios en el sureño estado seguían sin electricidad nueve días después del paso del huracán que dejó 47 muertos en todo el país.
Biden afirmó ayer: “tenemos que escuchar a los científicos, los economistas y los expertos en seguridad nacional. Todos nos dicen que esto es una alerta roja”, dijo en el distrito neoyorquino de Queens. “La nación y el mundo están en peligro y no es una exageración. El cambio climático es un hecho”, señaló.
Biden, quien impulsa una ley que incluye importantes fondos para la economía verde, argumenta que los sucesos por clima extremo en Estados Unidos este verano son un presagio de que habrá peores manifestaciones del calentamiento global.
Ida golpeó la costa del Golfo de México el 29 de agosto como huracán categoría 4, provocó grandes inundaciones y dejó sin energía varias franjas del estado de Luisiana.
En tanto, el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, promulgó ayer la controvertida propuesta legislativa que instaura decenas de restricciones para ejercer el derecho al voto e incluso facilita la anulación de los comicios, asegurando que ahora “será más difícil hacer trampas en las urnas”.
El Congreso de Texas sacó adelante el proyecto de ley, después de que los demócratas intentaron en varias ocasiones retrasar su aprobación por falta de quórum ausentándose de las sesiones de votación.
El texto, entre otras cosas, prohíbe la votación en coche, los colegios electorales provisionales, los centros de votación de 24 horas, como los utilizados en las pasadas presidenciales en el condado de Harris, donde Biden se impuso con 56 por ciento de los votos, e incluso acudir a las urnas los domingos antes de las 13 horas.
Texas es parte de un grupo de estados controlados por el Partido Republicano, como Georgia o Florida, que ha aprobado leyes similares, después de que el ex presidente Donald Trump aseguró, sin pruebas, que fue víctima de un fraude en los pasados comicios presidenciales.
En otro orden, el juicio contra cinco hombres acusados de participar en los atentados del 11 de septiembre de 2001 contra Estados Unidos se reanudó ayer, aunque avanza muy lentamente en las comisiones militares de la bahía de Guantánamo.
La defensa intenta demostrar que las pruebas presentadas por el gobierno están teñidas por la tortura a la que fueron sometidos los acusados mientras estuvieron bajo custodia de la CIA.