París. Francia empezó a juzgar uno de los ataques más sangrientos en su suelo, seis años después de una noche de horror en París en noviembre de 2015 que dejó 130 muertos y un atacante con vida, que este miércoles se presentó como "combatiente" yihadista.
A las 13:17 horas (11:17 GMT), el tribunal abrió este proceso que se desarrollará en el imponente Palacio de Justicia de París durante unos nueve meses, con casi mil 800 partes civiles y 20 acusados, seis de ellos juzgados en rebeldía.
El francomarroquí Salah Abdeslam, presente en la sala, figura como el principal acusado por las matanzas perpetradas el 13 de noviembre en el Estadio de Francia, al norte de París, en las terrazas del este de la capital y en la sala de conciertos Bataclan.
Con mascarilla, camiseta y barba negras, el único miembro con vida de los comandos que atacaron París se había sentado en el banquillo de los acusados, rodeado de varios miembros de las fuerzas del orden, constató la AFP.
Sus primeras palabras ante el tribunal fueron la profesión de fe islámica y asegurar, cuando le preguntaron por su oficio, que lo dejó todo para convertirse "en combatiente del Estado Islámico", la organización yihadista que reivindicó el atentado.
"Una provocación", para Dominique Kielemoes, cuyo hijo murió en el ataque al bar La Belle Equipe. Los otros 13 acusados presentes se limitaron a confirmar su identidad y responder a las preguntas, sin realizar otros comentarios.
El presidente del tribunal, Jean-Louis Périès, decidió realizar un discurso inicial, algo poco común, para pedir que se mantenga la "dignidad" de la justicia en este proceso que, la prensa francesa, califica de "juicio del siglo".
Pero, tras una pausa de alrededor 30 minutos por la indisposición de uno de los acusados Farid Kharkhach --en "estado depresivo" por el trato recibido en prisión y a su llegada, según su abogado--, Abdeslam lanzó una diatriba contra el tribunal.
"Somos tratados como perros. Aquí es muy bonito, hay pantallas planas, pero allí atrás…", subrayó interrumpiendo y señalando con el dedo al presidente del tribunal. "Hace seis años que me tratan como un perro y nunca me he quejado", agregó.
"Juicio excepcional"
Este joven de 31 años, otrora un juerguista que cometía delitos menores antes de convertirse al yihadismo, es el único atacante con vida, el "décimo hombre", y el juicio deberá esclarecer su papel exacto.
"Velaremos por que este juicio excepcional no se convierta en un juicio de excepción", habían advertido sus abogados. Doce de los 20 acusados se enfrentan a la cadena perpetua por esa noche de horror que comenzó poco después de las 21 horas 15 en Saint-Denis.
En ese momento, un atacante suicida activó sus explosivos cerca del Estadio de Francia, donde tenía lugar un partido amistoso de fútbol entre Francia y Alemania, con miles de personas en las gradas, entre ellos el entonces presidente François Hollande.
Dos kamikazes más siguieron minutos después provocando la muerte de un conductor de autobús. Abdeslam también debía volarse pero acabó huyendo a Bélgica, porque, según los investigadores, su cinturón de explosivos era defectuoso.
A continuación, en el centro de París, dos comandos de tres hombres cada uno dispararon contra terrazas de bares y restaurantes y balearon a los asistentes a un concierto en el Bataclan, donde las fuerzas del orden lanzaron un asalto pasada la medianoche.
El saldo del peor ataque en París desde la Segunda Guerra Mundial fue de 130 muertos y más de 350 heridos, en un momento en que una coalición internacional luchaba contra el EI en Siria e Irak y miles de sirios buscaban llegar a Europa huyendo de la guerra.
Cuatro años de investigación permitieron reconstruir gran parte de la logística de los atentados y del recorrido que siguieron los miembros del comando: por un ruta migratoria desde Siria hasta sus escondites alquilados en Bélgica y cerca de París.
Los investigadores descubrieron una célula yihadista mucho mayor y responsable también de los atentados que dejaron 32 muertos el 22 de marzo de 2016 en el metro y en el aeropuerto de Bruselas, otro de los ataques que ensangrentaron Europa durante esos años.
Veinte hombres acusados de tomar parte en los ataques del grupo llamado Estado Islámico, que mataron a 130 personas y lesionaron a cientos en París en 2015, van a juicio en la capital francesa. El proceso inició hoy en un enorme tribunal diseñada especialmente en París. Vía Graphic News.