César Enríquez requiere de cuatro horas para convertirse en la mujer transexual Prietty Guoman, personaje que “canta, baila, salta y hace maromas” en la propuesta de teatro cabaret, donde el actor “se parte el alma” y reflexiona sobre diversos tabúes.
Enríquez, autor, director y protagonista de La Prietty Guoman celebrará el miércoles el aniversario número cinco del monólogo en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris. “Para interpretar a esta veracruzana pongo mucho más alma, corazón, honestidad y valentía que la que César tiene; además de usar tacones de 15 centímetros, cambiarme siete pelucas, estar en un largo proceso de maquillaje y ponerme diversos vestuarios, así como calentamiento vocal y físico” previos al espectáculo.
El actor aceptó: “Sí, sí existe una metamorfosis, una simbiosis entre yo y la Prietty, porque a fin de cuentas nuestros personajes terminan siendo nosotros mismos; la Guoman tiene mucho de César y por algo la interpreto. Sus historias son mías; incluso las de violencia que ella ha sufrido yo las he vivido, tal vez, en menor escala, pero de ahí viene la catarsis del personaje”.
La Prietty “busca algo que todos y todas merecemos: el amor, ser amada y entregar su corazón. Parecería una historia simple y de cuento de hadas, pero en esa travesía se desarrolla una historia de valentía y discriminación que, en el caso de la protagonista, es cinco veces más difícil”.
Entre anécdotas y parodias de canciones de Celia Cruz, Mariah Carey, Whitney Houston y Madonna, la mujer hace frente a los crímenes por homofobia, transfobia y misoginia provocados por la intolerancia en la sociedad mexicana.
Discurso jocoso
En escena Enríquez, acompañado por la música de Álvaro Herrera, cuenta la historia de La Prietty, una prostituta transexual, con mucho encanto y fanática de la película Pretty Woman, pero con un discurso jocoso, valiente y empoderado. “El chiste de este monólogo es hacerlo desde la comedia; que el público se ría de cosas bastante dolorosas y se enamore del personaje” son parte del cometido del dramaturgo.
Sobre cuál ha sido la clave del éxito de este monólogo, Enríquez comentó que son varios aspectos, y reiteró: “Es una obra hecha con mucho corazón, honestidad, valentía”.
Además, “es una propuesta cáustica, punzante y extremadamente divertida”.
La Prietty Guoman, que ha participado en diversos festivales y foros en México, así como en el extranjero, festeja su cinco años en el recinto ubicado en Donceles 36, colonia Centro Histórico, cerca de la estación Allende del Metro, con función única el 8 de septiembre a las 20:30 horas.