El Bosque de Chapultepec ha recibido una inversión histórica de 4 mil millones de pesos entre 2020 y 2021 para que “siga siendo el gran espacio que siempre ha sido: accesible, incluyente y absolutamente gratuito para sus más de 20 millones de visitantes anuales”, afirmó la secretaria de Medio Ambiente, Marina Robles.
Destacó que “el corazón” del proyecto es la restauración ambiental, que incluye la mejora de mucha infraestructura que a lo largo del tiempo estuvo abandonada y la intervención de la tercera sección, donde existe una serie de descargas de aguas residuales acumuladas.
Su “nueva cara”, estimó, se verá a finales de año con la mejora de sus espacios y la inauguración de la gran ofrenda monumental de Día de Muertos, en el parque Aztlán, que representa la primera fase de este proyecto privado.
Los desarrolladores preparan el proyecto ejecutivo que realizarán en lo que fue La Feria, con una inversión privada de 3 mil millones de pesos, cuya primera fase es esta ofrenda, para lo cual se firmó un convenio con el museo Dolores Olmedo.
La segunda etapa se iniciará a principios del próximo año con un museo de inmersión, donde parte de la obra del Dolores Olmedo se expondrá ahí también, y realizará otras actividades, para lo cual pagará al gobierno de la ciudad una contraprestación.
El monto a cubrir por ésta dependerá de los análisis realizados por la entrega del permiso administrativo temporal revocable (PATR) por 10 años, la inversión que ejercerá en los próximos tres años, el esquema financiero y la utilidad prevista, explicó.
Las obras que realiza el gobierno capitalino “van caminando bien y no se detendrán”, pese a la inconformidad de vecinos, con quienes se han tenido reuniones para explicarles los proyectos, como el de la calzada flotante, que unirá la primera y segunda sección.
Su preocupación “tiene que ver con la mejora de las condiciones ambientales del bosque y es precisamente en lo que se trabaja. Todos los proyectos van a dar atención y ellos van a estar muy contentos de que se desarrollen”.
Mencionó que “nunca se había hecho una inversión pública tan importante en el bosque y hacia finales de año vamos a tener muestras claras de la mejora de muchos de sus sitios”, aunque sus visitantes contarán además con la posibilidad de conocer la primera fase del parque Aztlán.