En el planeta se estiman entre 5 y 10 millones de especies de insectos extintas, lo cual representa entre 40 y 60 por ciento del total. Su tasa de desaparición es siete veces más alta que cualquier otro organismo vivo, señaló Alejandro Córdoba, del Instituto de Ecología de la UNAM.
Los insectos brindan una gran cantidad de servicios ecosistémicos, desde depredación de especies nocivas hasta la purificación del agua, pero los más conocidos son los polinizadores, como las abejas.
Actualmente, la norma oficial mexicana 059, que integra el listado de especies bajo algún tipo de protección, sólo incluye a siete familias de insectos, esto significa sólo 0.47 por ciento del total, “son números muy ridículos”, consideró el experto.
Durante la videoconferencia Conservación de Insectos en México, convocada por la Sociedad Científica Mexicana de Ecología, se refirió a que se trata del grupo más grande de especies y en biomasa. Detalló que en el norte del país hay menos registros que en el sur. “A través de los años se vio que los insectos fueron disminuyendo en masa y en especie, hay una crisis tremenda. Se conoce muy poco de las especies”, incluso por parte de organismos internacionales.
Estimó que la pérdida y degradación del hábitat es el factor más grave en la destrucción de especies, a lo cual también contribuyen los contaminantes, los insectos invasores y el cambio climático.
Entre las acciones inmediatas para enfrentar el problema planteó que no haya monocultivos, reducir la contaminación lumínica, hídrica y acústica, eliminar el uso de pesticidas, conservar hábitats, evitar la entrada de especies exóticas, reducir importación de productos nocivos y la educación.
Por su parte, Cisteil Pérez, del Instituto de Investigaciones en Ecosistema y Sustentabilidad de la UNAM, se refirió en particular a los coleópteros, los escarabajos y luciérnagas entre ellos. Los insectos polinizan, controlan malezas y plagas, son depredadores, alimento de otros animales, tienen muchas funciones ecológicas, dijo.
De los coleópteros, la investigadora expuso que en el país se han documentado unas 15 mil de 385 mil variedades que se estiman en el mundo, se trata de entre 4 y 10 por ciento de la fauna mundial. Se refirió a que en la norma 059 sólo hay cinco especies de escarabajos enlistadas bajo algún tipo de protección.
Destacó que hay ausencia de reglamentación y de normas sobre la explotación y comercialización de insectos comestibles en el país. “Sobre los insectos falta mucho por hacer, es un área poco conocida”. Dijo que también se debería cambiar la perspectiva hacia los insectos, dejar de verlos como enemigos de la humanidad.