De los menos de 10 mil pesos que ganan al mes los servidores de la nación, entre 35 y 50 por ciento deben dedicarlos a cubrir gastos como fotocopias para trámites de registro de los derechohabientes, viáticos, comida e Internet, por lo que una buena parte de los “ahorros” en gastos operativos de los que ha hablado la Secretaría de Bienestar, en la práctica, son cubiertos por los propios empleados.
Así lo afirmaron trabajadores de diferentes entidades federativas, quienes manifestaron su confianza en que éstas y otras condiciones laborales sean mejoradas con la llegada de Óscar Navarro, nuevo coordinador de la Unidad de Delegaciones de la dependencia.
Germán Barajas, integrante de los servidores de la nación en Tijuana, Baja California, dijo que el trabajo “a ras de tierra” lo obliga a hacer diversas erogaciones diarias que deberían estar cubiertas por sus empleadores, para no ver mermado su salario neto.
“De los 9 mil 700 pesos que ganamos por mes, te quedan libres unos 5 o 6 mil, porque al menos 35 por ciento se va en pagar copias (para los trámites de los beneficiarios de programas sociales), papelería, plumas, alimentos, transportes, tu plan del celular”, indicó.
Para Barajas, la reducción de costos operativos de los programas sociales (de 20 y hasta 30 por ciento y hasta 40 por ciento, según la Secretaría del Bienestar), “definitivamente” tiene que ver con que los empleados de la dependencia compensan con su propio salario los recursos que dejan de recibir de las autoridades.
En tanto, Eduardo Martínez, trabajador en Michoacán, coincidió en que la situación de este cuerpo de servidores públicos es “alarmante”, en buena medida porque tienen que destinar mucho de su propio dinero para cubrir las actividades diarias que exige su labor.
“Nuestro sueldo neto es de 4 mil 800 pesos a la catorcena, pero la mitad se va en copias y viáticos, dependiendo del programa que manejemos. Por ejemplo, para ir del municipio de Epitacio Huerta a Ciudad Hidalgo, tenemos que gastar mil 800 pesos diarios en taxis, en un viaje de una hora y 40 minutos. Cuando nos quejamos de que era un muy alto, (los delegados) nos contestaron cínicamente que entonces contratáramos un Uber”, lamentó.
Sin embargo, afirmó, con la llegada de Navarro hay expectativas de que las condiciones de trabajo puedan mejorar.
“Con el nuevo titular de delegados, parece que la cosa va a cambiar. Nos atendió personalmente y dijo que sabe de esta situación y va a cambiar. Tenemos fe en que así sea”, expresó.