Nueva York. Los remanentes del huracán Ida provocaron lluvias históricas en la costa este de Estados Unidos, con saldo de al menos 46 muertos y severos daños materiales, principalmente en Nueva York, Nueva Jersey, Pensilvania y Connecticut; se reportan inundaciones en sótanos, desbordamiento de ríos, y autopistas y bulevares se convirtieron en canales.
GALERÍA: Nueva York y Nueva Jersey inundadas; se declaran en estado de emergencia por 'Ida'.
El presidente Joe Biden señaló que el daño indica que “las tormentas extremas y la crisis climática ya están aquí, lo que constituye uno de los grandes desafíos de nuestro tiempo. Debemos estar mejor preparados. Tenemos que actuar”. Agregó que está en contacto con los gobernadores de los estados afectados.
Ida tocó tierra el domingo cerca de Port Fourchon, Luisiana, como un huracán categoría 4, y a medida que avanzó al norte se debilitó a tormenta, pero provocó tornados en zonas donde no suelen suceder, y tuvo suficiente fuerza para inundar Pensilvania, Nueva Jersey y Nueva York.
A su paso golpeó ya ocho estados, entre los más afectados Nueva Orleans y Luisiana, y ha dejado al menos 62 muertos en Estados Unidos, severos daños materiales y más de un millón de personas sin electricidad. El servicio meteorológico advirtió que la amenaza de tornados seguía vigente en las zonas afectadas, mientras Ida avanzaba a través de Nueva Inglaterra.
En Nueva Jersey, al menos 23 personas perecieron; los rescatistas tocaron de puerta en puerta para asegurarse de que no hubiera víctimas. Más de 200 vuelos fueron cancelados en el aeropuerto de Newark, según el portal de aviación FlightAware.
En la vecina ciudad de Nueva York, al menos 13 personas fallecieron, 11 de ellas al quedar atrapadas en sótanos inundados, informó el alcalde Bill de Blasio. Las víctimas tenían entre 2 y 86 años, detalló la policía. En el suburbio de Westchester se reportaron tres muertos.
La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, declaró estado de emergencia, y pidió a la población mantenerse alejada de carreteras y evitar viajes inncesarios.
Las inundaciones impidieron el tránsito en las principales vías de varios distritos de la gran ciudad, incluidos Manhattan, el Bronx y Queens, sumergiendo muchos vehículos, de donde fueron rescatadas cientos de personas.
Estaciones y vías del Metro quedaron inundadas al grado de que la Autoridad de Transporte Metropolitano suspendió todos los servicios. Videos publicados en tiempo real mostraban a los pasajeros parados en los asientos de los vagones llenos de agua. Cientos de vuelos fueron cancelados en los aeropuertos LaGuardia y J. F. Kenedy.
Otras cinco personas fallecieron en el área metropolitana de Filadelfia, en Pensilvania. Los servicios de emergencia realizaron miles de rescates en todo el estado, sacando a la gente de edificios, departamentos y automóviles, a medida que ciudades y carreteras se inundaban por las crecidas de los ríos.
Un policía murió luego de que su vehículo fue arrastrado por la corriente en Woodbury, Connecticut. En Maryland otro hombre perdió la vida al inundarse su departamento en Rockville, condado de Montgomery.
Biden aseguró en su mensaje que mantendrá la presión al Congreso para que apruebe su proyecto de ley de infraestructura de casi 1 billón de dólares para mejorar las carreteras, los puentes, la red eléctrica y los sistemas de alcantarillado.
Subrayó que el reto que suponen las tormentas y los incendios trasciende la política de una nación profundamente dividida. “Es una cuestión de vida o muerte y estamos todos juntos en esto”, apuntó. Se prevé que este viernes viaje al estado sureño de Luisiana, donde Ida destruyó edificios y dejó más de un millón de hogares sin electricidad.
“¿Cómo diablos podemos seguir ignorando las fuerzas destructivas del cambio climático?”, tuiteó el senador Bernie Sanders en un mensaje que incluyó videos con inundaciones en el Metro neoyorquino y otras zonas golpeadas.
Los científicos afirman que el cambio climático aumenta la frecuencia de los fenómenos meteorológicos extremos, como las grandes tormentas tropicales, las sequías y las olas de calor que influyen en los grandes incendios forestales.
En el caso de los ciclones, los vuelve más poderosos y transportan más agua, lo que representa una amenaza cada vez mayor para las comunidades costeras del mundo.
Al otro lado del Atlántico, varias zonas de España: Castilla-La Mancha, Cataluña y Comunidad Valenciana, fueron afectadas por inundaciones provocadas por una depresión aislada en niveles altos que provocaron daños en casas y automóviles y arrasaron cosechas.