La cubana Omara Durand fue protagonista en el atletismo de Tokio al ganar la final de 100 metros, clase T12, para llegar a siete coronas en Juegos Paralímpicos, en tanto que el lanzador brasileño Alessandro Rodrigo da Silva subió por segunda vez al podio en la cita japonesa, al triunfar en la final del disco, clase F11, para atletas con discapacidad visual casi total.
Durand, acompañada por su guía Yuniol Kindelán, revalidó el cetro conquistado en Río de Janeiro 2016 en esta ocasión con tiempo de 11.49, su mejor registro de la jornada en el Estadio Olímpico, en una modalidad para corredores con discapacidad visual.
Pese a que llovió desde temprano, la antillana de 29 años arrancó bien y tomó la punta para no dar ninguna opción a sus rivales y mantener un invicto que se remonta a 2011.
A la caribeña la escoltaron la ucrania Oksana Boturchuk, subcampeona, con registro de 12.03 segundos; la china Liang Yanfen, tercera (12.51), y la dominicana Darlenys de la Cruz, cuarta (12.53).
Plusmarquista mundial en 100 y 400 metros de su categoría, Durand ya logró una corona en la vuelta al óvalo de la lid japonesa, y en certámenes universales no pierde desde su primera victoria en la Nueva Zelanda en 2011.
Da Silva, plata en la impulsión de la bala en la misma categoría de la cita asiática, logró una marca de 43.16 metros, récord paralímpico, para ganar en Tokio su primera medalla de oro. Lo escoltaron el iraní Mahdi Olad (40.60) y el italiano de origen cubano Oney Tapia (39.52).
La delegación brasileña sumó también la presea de plata de Marivana Oliveira en la bala F53, para atletas de campo con discapacidad en el movimiento en torso, piernas y brazos, con un envío de 9.15 metros, para secundar a la ucrania Mariia Pomazan (12.24) y aventajar a la checa Anna Luxona (8.60).
El balista argentino Hernán Urra ganó plata en la clase F35 con récord panamericano de 15.90 metros, sólo cedió ante el uzbeco Khusniddin Norbekov, campeón (16.13), y relegó a la tercera plaza al chino Fu Xinhan (15.41).
Otra plata para argentina fue la de Brian Impellizzeri, en salto largo T37, en la que alcanzó su mejor marca personal de 6.44 metros, detrás del ucranio Vladyslav Zahrebelnyi (6.59).
El ucranio Maksym Krypak consiguió su cuarto oro en Tokio 2020 y el noveno título paralímpico al batir su propio récord mundial en 100 metros libres masculinos S10, de 57.19 segundos.
La representación de Brasil encabezó una vez más el desempeño de la natación latinoamericana en los Paralímpicos, al sumar dos medallas de oro en el Centro de Deportes Acuáticos, donde Talisson Henrique Glock se impuso en 400 metros dorso, clase S6, y Gabriel Geraldo dos Santos en 50 espalda (S2).
Glock empleó 4.54.42 minutos para conquistar su primer título en Tokio, después de dos bronces, delante del italiano Antonio Fantin, ganador de la plata (4.55.70), y del ruso Viacheslav Lenskii (5.04.84), bronce en la categoría S6, donde compiten los nadadores que tienen una coordinación moderadamente limitada en un lado del cuerpo, y mayor en la parte inferior de torso y piernas.
Dos Santos necesitó de 53.96 segundos para conseguir su segundo cetro en Tokio, luego del triunfo en 200 metros libres y el tercer puesto en 100 dorso.