El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que no acepta chantajes de nadie y, a pregunta expresa sobre la acción de integrantes del magisterio chiapaneco el viernes pasado, los retó a que pregunten a sus bases si él merece ese trato si siempre los ha defendido.

“¿Saben quien entonces defendía al magisterio, aparte de ellos? El movimiento nuestro, siempre.

“Por eso tengo autoridad moral para decirles a dirigentes que ‘se pasan’ y les puedo decir que le pregunten a las bases, si son democráticos; pregunten a los maestros, a las maestras si es correcto lo que hacen, de darme a mí ese trato.

Y empiezan a corear ‘es lo mismo’. No, no es lo mismo. Hasta les dije en un discurso, se me vino a la mente algo que uno también aprende en la lucha: “ni Frena ni la CNTE detienen al Presidente”, señaló.

--¿Está el diálogo roto con la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE)?, se le preguntó en la conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional.

—Nosotros no tenemos diferencias con nadie, solo que no aceptamos chantajes. Imagínense que voy a una gira y me detienen, como Frena (el grupo opositor a su gobierno), pensando que ya con eso los medios tendrán tema para estarnos atacando.

“Pues me quedo ahí. No me quieren dejar pasar, pues aquí me quedo. Yo también quiero protestar”, respondió.

Subrayó que su gobierno no debe nada y ha tratado a las maestras y a los maestros como se merecen, recalcó.

“No se les insulta, no se les desprestigia, no se les reprime. Así era antes, y los medios callaban y hasta aplaudían; había hasta campañas en contra de los maestros, les echaban la culpa de la baja calidad en la educación.

Recordó que una vez sacaron de ocho columnas en un periódico para señalar supuestos ingresos millonarios de un maestro.

“Lo qué pasa es que yo no odio pero no olvido, y ya soy mayor de edad, ya estoy chocheando pero me funciona muy bien la memoria”, expresó.

Sin embargo, dijo, no se atrevieron a poner en ocho columnas diciendo que un expresidente de la República recibe una pensión de cinco millones de pesos mensuales, pero sí la campaña contra los maestros, que uno ganaba 600 mil pesos mensuales.

“¡Falso!”, expresó el Presidente.

Recordó también que también a otro maestro, dirigente del magisterio de Oaxaca, “le gustaba mucho el sonido de los hielos en los vasos; lo acusaron de alcohólico, al dirigente de la CNTE en Oaxaca, el maestro Núñez, finado, que en paz descanse Rubén.

“¿Qué le hicieron a este maestro el sexenio pasado? Lo metieron a la cárcel y lo acusaron de lavado de dinero, siendo maestro humilde, honesto y lo tuvieron en una cárcel de alta seguridad”, añadió.

“La represion desatada desde Gobernación por Chong y por todos los que ahora aplauden todo lo que se orienta a afectarnos”.

Luego reprochó la actitud que tuvieron integrantes del magisterio de Chiapas, y les dijo que si tienen necesidad de atender asuntos, vayan con la secretaria de Educación Pública.

La maestra Delfina es íntegra, honesta. Nunca había estado una maestra de secretaria de Educación Pública.

Algunos dicen ‘cuál cambio’ pero ahí me doy cuenta de que vamos bien.

A lo mejor si me estuviesen aplaudiendo no estaríamos con el propósito de transformar al país, por el bien de todos porque ya no se podía con lo mismo, con ese proceso decadente, una gran corrupción, añadió.

Era urgente y justo llevar a cabo el proceso de transformación.

Altas ventas

En medio de esa exposición, el Presidente invitó a leer su más reciente libro, y dijo que si le va bien a su obra los críticos no lo mencionan.

“Me llama mucho la atención que están calladitos, no dicen nada, nada. Y tengo información, les voy a presumir, de que se está vendiendo muchísimo.

No puedo decir que como pan caliente, pero sí se está vendiendo mucho porque la gente quiere saber muchísimas cosas que se ocultan en los medios”, dijo.

No se hace periodismo de investigación, aseveró; bueno, si, para estar contra nosotros, por eso los refritos. Sale una nota falsa y ahí se cuelgan todos.

Más adelante citó que en España hay inconformidad por el incremento a energéticos, suministrados por las empresas que en México eran consentidas.

A mi me tienen un poco de coraje quienes votaron por el presidente Fox creyendo que iba a haber un cambio.

A nadie le gusta que le diga que se le señale que se equivocaron y en lugar de rectificar y no caer en la autocomplacencia siguen.

“Y como diría el propio ex presidente Fox: ¿y yo por qué?“, dijo.