El Senado aprobó hoy la nueva Ley Orgánica de la Armada de México, la que se armoniza y actualiza, a fin incluir las nuevas tareas y facultades que se le han otorgado sobre el control de los puertos y la seguridad y protección marítima.
El dictamen fue aprobado con 84 votos a favor, once en contra y 8 abstenciones, modificó la iniciativa del presidente Andrés Manuel López Obrador, al establecer sanciones más severas a los marinos que tengan nexos o estén ligados al narcotráfico, los que serán juzgados por el delito de traición a la patria y dados de baja de forma permanente, cuando haya una sentencia condenatoria al respecto.
Las comisiones dictaminadoras incluyeron esa modificación, a petición expresa de la Secretaría de Marina, a fin de que no haya impunidad para sus elementos que incurran en delitos del crimen organizado.
Al presentar el dictamen, los presidentes de las Comisiones de Marina y de Estudios Legislativos Segunda, Eruviel Avila, del PRI y la Morenista Ana Lilia Rivera, coincidieron en que la reforma propuesta por el ejecutivo federal es para armonizar la a Ley Orgánica de la Armada de México con las reformas de diciembre del 2020, a la Ley de la Administración Pública Federal y otros ordenamientos, que la fortalecen como autoridad de seguridad marítima y portuaria.
La senadora del PRI, Beatriz Paredes, consideró que la nueva legislación robustece a la armada nacional e incluye el compromiso de integrar a los marinos mercantes.
En el dictamen se destaca que la nueva ley orgánica regula “ de manera puntual” las tareas que ejecuta la Armada de México, para mantener el Estado de derecho, cumplimiento de las leyes nacionales y convenios internacionales en las zonas marinas, costas y recintos portuarios.
Ello, “ brindará mayor certeza jurídica a la institución y al personal, tanto en su organización como en su actuar, siempre apegado a derecho y con respeto irrestricto a los derechos humanos”, lo que generará mayor claridad y entendimiento en su aplicación.
Se propone actualizar la m1s1on de la Armada de México, a fin de contemplar la protección de la soberanía de la Nación y el mantenimiento del estado de derecho en las zonas marinas mexicanas.
La nueva ley especifica cada uno de los niveles de mando que componen a la Armada de México y precisa que el acceso a éstos se llevará cabo sin distinción de género, con lo cual se garantiza la igualdad de derechos, responsabilidades y oportunidades de las mujeres y los hombres pertenecientes a esa Institución.
Asimismo, se establecen las facultades especificas con las que cuentan el Mando Supremo y el Alto Mando. Se mantienen las disposiciones vigentes relativas a la clasificación de los mandos y sus suplencias. Sin embargo, se propone realizar precisiones respecto a las suplencias del Alto Mando, de los Mandos Superiores en Jefe y de los Mandos Superiores, con el fin de dar mayor flexibilidad en su aplicación y con ello dar mayor certeza jurídica en la continuidad del ejercicio de las atribuciones de las distintas autoridades de la Armada de México.
Se incluyó un capítulo que regula la integración de las Fuerzas Navales, de las fuerzas de tarea, de las Regiones Navales, del Cuartel General del Alto Mando, de las Zonas Navales y de los Sectores Navales, acorde a lo previsto en la Ley Orgánica de la Armada de México vigente.
El senador sin partido, Emilio Alvarez Icaza, expuso en tribuna que la reforma “abre las puertas para que la Secretaría de Marina se ocupe de las tareas militares, lo que fue rechazado por los Morenistas José Ramón Enríquez y Américo Villarreal.
La presidenta del Senado, Olga Sánchez Cordero, que ayer se estrenó en el cargo, remitió la minuta a la Cámara de Diputados.