Madrid. El precio de la electricidad en España alcanzó otro récord histórico, el cuarto en menos de 15 días, al situarse en un precio medio de 140.32 euros por megavatio, lo que supone más de 70 por ciento más que hace tres años, cuando asumió el poder el actual presidente del gobierno, el socialista Pedro Sánchez, quien se comprometió durante la campaña a impedir que siguiera aumentando la “pobreza energética”. A la subida sin control del precio de la electricidad se sumó también el de la gasolina y el gas, lo que en conjunto ha provocado un aumento estructural de la inflación de 3.3 por ciento acumulado a lo largo del año.
Nunca en España se había pagado tan cara la electricidad ni el gas ni la gasolina. Más aún, en plena ola de calor en todo el país, con temperaturas que superan por momentos 45 grados, más de 11 millones de hogares en el país viven sometidos a las turbulencias de los precios del mercado energético y a la especulación sin escrúpulos de las grandes operadoras en el país, es decir, las multinacionales de la electricidad, como Iberdrola, Endesa o Acciona.
El Ejecutivo español, integrado por la coalición del Partido Socialista Obrero Español y Unidas Podemos, siguen estudiando la situación sin presentar a la fecha ninguna iniciativa concreta para mitigar el aumento del gasto de la electricidad en la sociedad española, sobre todo en los sectores más desfavorecidos y ante el aumento de la población en riesgo de pobreza y exclusión social. Más aún: los precios siguen descontrolados y ahora ya no sólo el de la electricidad, sino también el de la gasolina y el gas, propiciado por el aumento del precio internacional del petróleo, y que en conjunto han ocasionado un incremento sostenido de la inflación de más de 3.3 por ciento acumulado durante el año, el mayor en nueve años.
Ante las críticas de la oposición y de las asociaciones de consumidores, la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, se defendió durante una comparecencia en el Congreso de los Diputados, al asegurar que las compañías que gestionan las centrales hidroeléctricas son las responsables de buena parte del encarecimiento, al ser la energía más cara y la que ha marcado el precio en el mercado mayorista en 65 por ciento de las horas de junio, de 64 por ciento de las de julio y de 59 por ciento de las de agosto. Y que en España ha afectado más que en otros países del entorno europeo.
Frente a la pasividad del gobierno para atajar la crisis, el malestar sigue en aumento por la escalada de los precios y las promesas incumplidas de los partidos en el poder. De hecho algunos ayuntamientos, como el de la localidad madrileña de Batres, anunció que a partir de ahora no iba a pagar la factura de la electricidad “por el abuso sistemático de las empresas eléctricas”.