Los precios del petróleo retrocedieron este martes, ya que se espera que la demanda disminuya después de que el huracán Ida ocasionó el cierre de refinerías en la costa estadunidense del Golfo de México, y mientras los países de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) se preparan para una reunión esta semana, luego de que Washington pidió al grupo que bombee más crudo.
La mezcla mexicana de exportación cedió 45 centavos y concluyó en 66.02 dólares por barril, de acuerdo con el precio publicado por Pemex.
El referencial estadunidense West Texas Intermediate (WTI) bajó 71 centavos a 68.50 dólares y el referente europeo Brent perdió 42 centavos a 72.99 dólares el barril.
Las cotizaciones del hidrocarburo anotaron su primera pérdida mensual desde marzo, pero se mantienen cerca de sus máximos de julio.
Ida, que tocó tierra en Estados Unidos el domingo como huracán de categoría 4, dejó fuera de servicio al menos 94 por ciento de la producción de petróleo y gas en el Golfo de México y causó daños en la red de Luisiana, que alberga gran parte de la infraestructura petrolera y de refinación estadunidense.
Casi toda Luisiana se quedó sin electricidad el lunes, después de que uno de los huracanes más poderosos en azotar la región derribó líneas de transmisión e inundó comunidades. Las áreas costeras quedaron anegadas por marejadas tan densas que invirtieron el flujo del río Misisipi.
Los precios se vieron presionados por la preocupación de que los cortes de energía y las inundaciones en la zona reduzcan la demanda de crudo de las refinerías.
Cerca de 1.7 millones de barriles por día (bpd) de producción de petróleo en alta mar se cerró, pero se puede reanudar más rápidamente que muchas operaciones de refinación en la costa del Golfo que perdieron el suministro eléctrico.
Nueve refinerías redujeron la producción o tuvieron que cerrar sus operaciones en la costa Este de Estados Unidos, incluida Baton Rouge de Exxon –con capacidad de 520 mil bpd–, que ha dejado fuera de servicio 2.3 millones de bpd de procesamiento, o 13 por ciento del total del país, según datos del Departamento de Energía.
Restaurar la energía, un aspecto fundamental para el bombeo y producción en las refinerías de Luisiana, podría llevar semanas, debido a las inundaciones, dijeron funcionarios de servicios públicos y analistas.
(Con información de la Redacción)